Chus Mateo tendrá que buscar a un nuevo jugador para sustituir a Facu Campazzo
El Real Madrid de Chus Mateo extrañó enormemente a Facu Campazzo en Vitoria, no solo porque es un imprescindible del equipo, sino porque su ausencia evidenció aún más las carencias que enfrenta el conjunto blanco: faltan jugadores. Ya sea por falta de adaptación, lesiones o porque necesitan más recursos para competir al máximo nivel en ambas competiciones.
Esto ha llevado a que la posibilidad de fichar a un jugador para reforzar las posiciones de base o escolta -aunque sea de forma temporal- comience a tomar fuerza en Valdebebas. «Cuando juegas al límite, como lo hemos hecho nosotros, con menos jugadores que en otras temporadas, llegas muy justo al final», admitió Chus Mateo tras la derrota (76-72) en el Buesa Arena. De hecho, al analizar el rendimiento del equipo, se puede ver que, salvo Gaby Deck, la segunda unidad prácticamente no existe.
Las decisiones de Chus Mateo no fueron las más acertadas
Con la baja de Andrés Feliz, que estará fuera al menos hasta principios de diciembre, y la sanción de Facu Campazzo, Chus Mateo se vio obligado a colocar a Sergio Llull como base en el último partido. Esto, que tendrá que repetirse incluso con el regreso del argentino el jueves, ha obligado al jugador de Mahón a modificar su rol.
En lugar de ser quien asuma los tiros, como solía hacer en las últimas temporadas saliendo desde el banquillo, Llull tuvo que encargarse de distribuir el juego para que otros tomaran esa responsabilidad. Como resultado, los puntos que suele aportar desde el banquillo desaparecieron. De hecho, salvo Gaby Deck, quien no fue titular pero jugó muchos minutos (25:47) y sumó 11 puntos, el resto de los jugadores de la segunda unidad apenas tuvieron impacto.
En busca de un nuevo perfil
Ante las circunstancias actuales, en Valdebebas empieza a ganar peso la idea de reforzar la posición de base. Se busca un perfil que pueda desempeñarse como ‘1’, alternando con Campazzo, e incluso como ‘2’ para aportar puntos.
No obstante, la prioridad inmediata es el partido de este jueves contra el Panathinaikos, actual campeón de la Euroliga, un encuentro que podría agravar la situación de un Real Madrid que acumula solo dos victorias en los últimos siete partidos desde que perdió la final del primer título de la temporada ante el Unicaja.