Alberto Chicote se ha ganado un lugar destacado en el panorama gastronómico español gracias a su talento en la cocina y su implacable personalidad en programas como «Pesadilla en la cocina». Sin embargo, en una reciente entrevista en «Y ahora Sonsoles», el chef ha mostrado un lado completamente distinto: su faceta más tierna y personal.
7La transformación personal de Chicote: más allá de la cocina
Chicote ha experimentado una transformación personal notable en los últimos años. Ha perdido 40 kilos en 18 meses gracias a una dieta saludable y ejercicio regular, un cambio que atribuye a la disciplina que le enseñaron sus padres y a la necesidad de cuidar su salud.
«No hay milagros. No hay productos que te vayan a hacer así… Hay que ir al médico, consultar el caso de cada uno y ponerse en manos de un profesional siempre», dijo Chicote a Nuria Roca en su programa.
Más allá de su pasión por la cocina, Chicote también ha demostrado un gran amor por el rugby, deporte que practicó desde los 14 hasta los 20 años.
«Me acuerdo mucho de él, pero no nos hemos vuelto a ver», explicó Chicote en una entrevista para el diario Marca en 2017, hablando de su compañero de equipo, Javier Bardem.
La entrevista de Chicote en «Y ahora Sonsoles» ha revelado un lado humano que conmueve. Más allá del chef implacable que hemos visto en «Pesadilla en la cocina», se ha mostrado un hombre apasionado por su trabajo, su familia y su vida.
La transformación personal de Chicote, su amor por Inma y su pasión por la cocina demuestran que detrás del chef exigente se esconde un hombre sensible y romántico. Esta faceta personal ha cautivado al público y ha hecho que lo admiremos aún más.