Todos tenemos pequeñas costumbres o hábitos que repetimos casi sin pensar. Son esas «manías» que, aunque parecen inofensivas, forman parte de nuestro día a día. ¿Te has encontrado alguna vez reorganizando los cubiertos en la mesa o evitando pisar las líneas del suelo? Aunque estas manías pueden parecer curiosas, no debemos confundirlas con un trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), una condición más grave y compleja.
Es importante entender la diferencia entre manías y TOC. Mientras que las manías son comportamientos que podemos elegir ignorar, el TOC está ligado a una ansiedad intensa que impulsa a las personas a cumplir con ciertos rituales para aliviar esa angustia. A continuación, te presentamos algunas de las manías más comunes que, aunque no sean tan graves como un TOC, pueden ser sorprendentes.
6Repetir acciones hasta que «se sientan bien»
A veces, las manías se manifiestan en la repetición de acciones hasta que se «sienten bien». Esto puede incluir actividades como encender y apagar una luz varias veces, revisar Instagram u otras redes sociales cada cierto tiempo o ajustar un objeto repetidamente hasta que esté en una posición satisfactoria. Aunque puede parecer extraño, muchas personas realizan estos pequeños rituales sin que interfieran en su vida diaria.
En el TOC, sin embargo, estas repeticiones se vuelven una necesidad incontrolable. Si no se realizan de manera adecuada, la persona experimenta un malestar intenso. En cambio, alguien con una simple manía puede sentir cierta incomodidad si no completa su ritual, pero puede seguir adelante con su día sin grandes problemas.