Estas son las manías más comunes, y no es lo mismo que TOC

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Todos tenemos pequeñas costumbres o hábitos que repetimos casi sin pensar. Son esas «manías» que, aunque parecen inofensivas, forman parte de nuestro día a día. ¿Te has encontrado alguna vez reorganizando los cubiertos en la mesa o evitando pisar las líneas del suelo? Aunque estas manías pueden parecer curiosas, no debemos confundirlas con un trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), una condición más grave y compleja.

Es importante entender la diferencia entre manías y TOC. Mientras que las manías son comportamientos que podemos elegir ignorar, el TOC está ligado a una ansiedad intensa que impulsa a las personas a cumplir con ciertos rituales para aliviar esa angustia. A continuación, te presentamos algunas de las manías más comunes que, aunque no sean tan graves como un TOC, pueden ser sorprendentes.

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Necesidad de simetría en lo que les rodea o pueden ordenar, una de las manías más intensas

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La manía por la simetría es otra de las conductas más comunes. Quienes la padecen necesitan que los objetos estén perfectamente alineados o distribuidos de manera equilibrada. Esto se observa, por ejemplo, cuando alguien acomoda los cubiertos en la mesa hasta que todos queden rectos, o cuando repite varias veces un dibujo porque las líneas no están completamente paralelas.

En una persona con TOC, esta necesidad de simetría puede volverse tan intensa que interfiere en su vida cotidiana. La diferencia es que una manía por la simetría puede ser satisfecha o ignorada sin grandes consecuencias, mientras que el TOC genera una sensación de incomodidad extrema si el entorno no está «perfecto».