La cesta de la compra vuelve a ser protagonista con la modificación del IVA en alimentos básicos a partir del 1 de octubre de 2024. Tras una rebaja temporal al 0%, el IVA de productos como el pan, los huevos, las frutas y verduras sube al 2% hasta final de año. Este cambio, aunque supone un incremento, mantiene aún un tipo reducido con respecto al habitual, como parte de las medidas para mitigar el impacto de la inflación en los hogares españoles.
A continuación, analizamos en detalle cómo te afecta esta modificación y qué productos están incluidos.
¿Qué alimentos suben de precio?
La subida del IVA al 2% afecta directamente a los alimentos básicos que previamente se beneficiaban del tipo 0%. Pan, huevos, frutas, verduras, entre otros, verán ligeramente incrementado su precio final en el supermercado. Es importante destacar que esta subida es inferior al IVA habitual de estos productos, que se sitúa en el 4%, manteniéndose así una medida de apoyo al consumidor. Esta decisión responde a la recomendación de la Comisión Europea de ir retirando progresivamente las medidas anticrisis implementadas para paliar las consecuencias económicas derivadas de la inflación y los conflictos internacionales.
El aceite de oliva, protagonista indiscutible de la dieta mediterránea, también experimenta cambios en su tributación. Tras disfrutar de un IVA del 0% durante el tercer trimestre del año, a partir de octubre, su IVA se sitúa en el 2% hasta el 31 de diciembre. A diferencia de otros productos básicos, el aceite de oliva se incorpora de forma permanente a la cesta de productos con tipo superreducido, lo que significa que, una vez finalizado el periodo transitorio, su IVA se fijará en el 4%, en lugar del 10% que se aplicaba anteriormente. Esta medida supone un ahorro significativo a largo plazo para los consumidores y un impulso para el sector olivarero español.
¿Qué cambia a partir de enero de 2025?
Con la vista puesta en el futuro, es importante conocer las perspectivas para el IVA de los alimentos en 2025. Si bien aún no hay decisiones definitivas, se espera que el Gobierno continúe monitorizando la evolución de la inflación y el impacto en la cesta de la compra. La Comisión Europea juega un papel fundamental en este proceso, instando a los Estados miembros a la normalización fiscal. Es probable que veamos una revisión de los tipos reducidos de IVA en los próximos meses, con el objetivo de volver progresivamente a los tipos habituales, siempre teniendo en cuenta la situación económica de las familias.
El sector de la alimentación, por su parte, aboga por mantener medidas de apoyo que permitan controlar los precios y garantizar el acceso a una alimentación saludable. Organizaciones de consumidores también se muestran atentas a la evolución del IVA en alimentos, reclamando transparencia y medidas que protejan el poder adquisitivo de los hogares.
Es fundamental mantenerse informado sobre las novedades en materia de IVA para poder planificar adecuadamente la economía doméstica. Comparar precios, buscar ofertas y priorizar el consumo de productos de temporada son estrategias clave para optimizar el gasto en alimentación.
En resumen:
- Pan, huevos, frutas y verduras: IVA al 2% hasta el 31 de diciembre de 2024.
- Aceite de oliva: IVA al 2% hasta el 31 de diciembre de 2024. A partir de enero de 2025, IVA al 4%.
- Pasta y aceites de semillas: IVA al 7,5% hasta el 31 de diciembre de 2024.
- Se espera una revisión de los tipos reducidos de IVA en los próximos meses, con posible vuelta a los tipos habituales en 2025.