La televisión española ha estado marcada por un episodio curioso en el que Risto Mejide, presentador de ‘Todo es mentira’, encontró una forma de eludir el veto impuesto por Mediaset sobre las imágenes de Bárbara Rey y Juan Carlos I.
Este veto se desencadenó tras la publicación de fotografías en una revista holandesa, lo que generó una serie de reacciones en medios de comunicación y en el propio programa de Risto. A continuación, se analizarán los diferentes aspectos de este evento y la manera en que ‘Todo es mentira’ logró mantener el tema en la conversación mediática.
4La estrategia legal y artística de ‘Todo es mentira’
El programa ‘Todo es mentira’ no se detuvo ante la prohibición. Risto Mejide y su equipo idearon una forma creativa de saltar el veto, haciendo uso de la sátira. En una de las secciones, mostraron una revista en la que las imágenes estaban completamente en negro, alegando que había pasado por el departamento legal de Mediaset.
Esto no solo fue un comentario ingenioso sobre las restricciones, sino que además resaltó el uso de la legalidad como un medio de protección tanto para el programa como para su contenido.