Hace cuatro años, el mundo de la historieta perdió a uno de sus grandes genios: Joaquín Salvador Lavado, más conocido como Quino. Este talentoso humorista gráfico argentino, creador de Mafalda, dejó un legado cultural inmenso a través de su obra. Hoy, recordamos no solo su vida, sino también los 60 años de Mafalda, un personaje que ha trascendido generaciones con su mordaz crítica social, su preocupación por el mundo y su ironía.
3La crítica social en cada viñeta
Quino utilizaba las viñetas de Mafalda para expresar su visión crítica de la realidad. Cada situación cotidiana retratada en la vida de Mafalda y su familia estaba cargada de un mensaje. Desde la relación con sus padres, la política del país, hasta el conflicto con amigos como Manolito, un defensor del capitalismo, o Susanita, con sus sueños conservadores de ser ama de casa, cada personaje tenía un propósito claro: representar diferentes facetas de la sociedad.
La genialidad de Quino radicaba en su habilidad para abordar temas complejos de manera sencilla y accesible, sin perder su profundidad. Las reflexiones de Mafalda acerca de la política, la guerra y la pobreza eran temas recurrentes, pero siempre presentados desde una perspectiva que permitía a los lectores pensar, reflexionar y, en muchos casos, reírse de las contradicciones del mundo moderno.