Los videojuegos de mundo abierto han sido un pilar en la industria durante muchos años, y su evolución los ha llevado a ser cada vez más ambiciosos en su planteamiento. A pesar de lo que podría parecer, no siempre el crecimiento de estos mundos virtuales está relacionado con el tamaño del mapa.
Y es que existen videojuegos antiguos cuyos mundos eran extraordinariamente extensos, algo que hoy en día no es tan común. La razón detrás de esto es que actualmente se tiende a priorizar la riqueza de los detalles y la experiencia del jugador en lugar de simplemente aumentar el terreno a explorar. Títulos como Grand Theft Auto V, Elden Ring y las últimas entregas de The Legend of Zelda son buenos ejemplos de esto, con mapas grandes pero centrados en ofrecer variedad y profundidad.
De hecho, muchos gamers todavía consideran que el mapa de GTA V es uno de los más extensos dentro de los videojuegos, y aunque sin duda es amplio, no está ni cerca de los títulos que realmente han llevado el tamaño de los mundos virtuales a otro nivel.
El mapa más grande de los videojuegos
El mundo de GTA V cubre una extensión de 75 km², mientras que el de The Legend of Zelda se aproxima a los 72 km². Con estos datos en mente, echemos un vistazo a algunas de las creaciones más gigantescas en la historia de los videojuegos.
También, uno de los nombres que no puede faltar es Minecraft, aunque su mapa tiene una peculiaridad: se genera de forma procedural. Esto significa que no está completamente diseñado de antemano, sino que cada partida crea su propio mundo de manera aleatoria, lo que permite que el mapa crezca hasta dimensiones astronómicas. En cifras, llega a abarcar hasta 3.600.000.000 km², lo que lo convierte en uno de los espacios más vastos de cualquier videojuego.
Sin embargo, si nos enfocamos exclusivamente en mundos diseñados completamente desde cero, sin generación procedural ni inspiración en la Tierra, el mapa más grande pertenece a The Elder Scrolls II: Daggerfall. Con sus 161.600 km², este título es el líder indiscutible en cuanto a mapas gigantes en videojuegos, una hazaña difícil de superar.