El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, ha emitido una declaración conmovedora sobre el naufragio de una embarcación que transportaba a migrantes en la isla de El Hierro, Canarias. Este suceso trágico ha dejado un saldo de nueve fallecidos y 48 desaparecidos, una dolorosa realidad que Torres califica como un «drama humanitario» que debe sensibilizar a todos.
El titular canario destaca que estas personas, al igual que los propios canarios en el pasado, buscan una oportunidad de prosperidad al aventurarse en peligrosas travesías marítimas. Este hecho, según Torres, «demuestra que estamos hablando de personas que, como hoy, un día de tremendo dolor, pierden la vida en el mar».
LA NECESIDAD DE UNA REFORMA MIGRATORIA INTEGRAL
Torres hace un llamado a quienes «quieren poner muros en el mar» y a quienes tratan a los inmigrantes con desdén, recordando que son seres humanos en busca de un futuro mejor. El ministro reconoce la dificultad para llegar a acuerdos sobre la reforma de la Ley de Extranjería, pero subraya que el Gobierno «tiende la mano» al Partido Popular, instándolos a que «ya se les acaban las excusas» para alcanzar un consenso.
LA COOPERACIÓN ENTRE ADMINISTRACIONES PARA ABORDAR LA CRISIS MIGRATORIA
Torres destaca que el Gobierno de España, el Ejecutivo canario y el Partido Popular han estado en «contacto permanente» en los últimos días, y prevé que el próximo encuentro para abordar la reforma de la Ley de Extranjería será «inminente». El ministro reconoce que hay que establecer el grupo mínimo que deben tener las comunidades autónomas y otras medidas, pero afirma que volverán a «comprobar si realmente hay voluntad de acuerdo» por parte del PP.
UN LLAMADO A LA EMPATÍA Y LA SOLIDARIDAD
La declaración del ministro Torres refleja una profunda empatía por la situación de los migrantes que arriesgan sus vidas en el mar, reconociendo que son personas que, como los propios canarios en el pasado, buscan una oportunidad de prosperidad y un futuro mejor. Ante este escenario, Torres hace un llamado a la sensibilidad y a la necesidad de solidaridad con quienes se ven obligados a emprender estas peligrosas travesías, instando a quienes quieren imponer barreras y a quienes miran a los inmigrantes con desdén a que reflexionen sobre la humanidad que subyace en esta crisis.
En conclusión, el ministro Torres ha abordado con compasión y determinación este drama humanitario, resaltando la urgencia de una reforma migratoria integral que atienda a la realidad de las personas que buscan una vida mejor, y la importancia de la cooperación entre las distintas administraciones para encontrar soluciones efectivas y empáticas a esta crisis.