Los secretarios generales de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, lideran una movilización nacional con el objetivo de presionar al Gobierno español para que apruebe una disminución de la jornada laboral semanal antes de finalizar el año. Esta iniciativa, que cuenta con el respaldo de miles de trabajadores y sindicalistas, busca reducir el actual límite de 40 horas semanales a 37,5 horas, un compromiso adquirido previamente por los agentes sociales.
La concentración de este jueves frente a la sede de la CEOE (Confederación Española de Organizaciones Empresariales) en Madrid ha sido el arranque de una serie de manifestaciones que se extenderán por todo el país. Sin embargo, los líderes sindicales denuncian que el Ayuntamiento de Madrid ha dificultado el desarrollo de la protesta al prohibir el corte de la calle Diego de León, lugar donde se habían congregado los manifestantes.
Acusaciones a la CEOE y Llamado al Gobierno
Según Álvarez y Sordo, la CEOE está bloqueando las negociaciones sobre la reducción de jornada, una medida que afectaría a 12 millones de trabajadores. Los sindicalistas afirman que la patronal se ha aliado con el partido político Junts para frenar esta iniciativa, argumentando que el compromiso de este partido con la CEOE de votar en contra de la reducción ha sido determinante.
En este contexto, los líderes sindicales han exigido a la CEOE que clarifique públicamente su postura sobre la disminución del tiempo de trabajo y han instado al Gobierno a «no dar derecho de veto» a la patronal. Asimismo, han solicitado al Ejecutivo que «sea valiente» y apruebe un real decreto para reducir la jornada laboral si la CEOE mantiene su bloqueo a la medida.
Postura del Partido Popular y Estrategia Sindical
Por otro lado, tanto Sordo como Álvarez han valorado positivamente que el líder del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, se haya abierto a negociar una reducción de la jornada laboral con los sindicatos. Sin embargo, han manifestado que la propuesta del PP, que contempla una semana de cuatro días y jornadas de entre 9 y 9,5 horas en algunos sectores, aún no convence a los líderes de CCOO y UGT.
Finalmente, los secretarios generales han anunciado que se reunirán con los diferentes grupos políticos con representación en el Congreso, excluyendo a Vox, con el fin de que se posicionen sobre la reducción de la jornada laboral. De esta manera, los sindicatos buscan mantener el impulso y la presión necesarios para lograr que el Gobierno cumpla con su compromiso antes de que termine el año.