La imperiosa necesidad de una Ley de Industria que brinde a España una política industrial fuerte y una soberanía estratégica ha sido la demanda central de los principales sindicatos del país ante el Parlamento. José Antonio Pasadas, del sindicato UGT FICA, y José Manuel Casado, de CCOO Industria, han expuesto ante la Comisión de Industria los reclamos y propuestas de sus organizaciones en el proceso de tramitación del anteproyecto de esta Ley de Industria.
Ambos sindicalistas han hecho hincapié en la urgencia de establecer un Pacto de Estado por la Industria que permita alcanzar un diálogo social efectivo para la construcción de una ley que posicione a España a la altura de los tiempos de cambio que enfrenta el sector a nivel global. En este sentido, han destacado la necesidad de que la futura legislación tome en cuenta las políticas industriales implementadas por potencias como Estados Unidos, China y la propia Unión Europea.
La Industria como Motor Económico y Social
Los representantes sindicales han subrayado que la industria es un sector fundamental no solo en el ámbito económico, sino también en lo social y demográfico, ya que genera empleo de calidad. Por ello, han solicitado al Parlamento que haga posible la concreción de este Pacto de Estado y la Ley de Industria, con el fin de dotar a España de una autonomía estratégica y una verdadera soberanía industrial.
La Necesidad de una Política Industrial Integral
Desde la óptica de los sindicatos, España necesita una política industrial de altura de miras que permita al país adaptarse a los tiempos de cambio que atraviesa el sector a nivel global. Para lograr este objetivo, los agentes sociales han demandado que los diferentes grupos parlamentarios trabajen en conjunto para alcanzar una Ley de Industria que siente las bases de una política industrial fuerte y coherente.
El Llamado a la Acción Parlamentaria
Los responsables de UGT FICA y CCOO Industria han puesto sobre la mesa la urgencia de que el Parlamento dé curso a la tramitación de la Ley de Industria, atendiendo a las reivindicaciones y propuestas planteadas por los agentes sociales. Esta nueva legislación, según los sindicalistas, debe ser el resultado de un Pacto de Estado que garantice el diálogo social y posicione a España como una potencia industrial capaz de hacer frente a los desafíos del mundo globalizado.