En un importante paso hacia la protección de los menores de edad en el ámbito de los contenidos audiovisuales, 24 prestadores de servicios de comunicación audiovisual en España han suscrito un nuevo Código de Conducta que regula la calificación de los programas y el uso de descriptores visuales. Este nuevo código, que busca adaptarse a la reciente Ley General de Comunicación Audiovisual, plantea cambios significativos en comparación con el antiguo sistema de autorregulación.
El Nuevo Sistema de Calificación por Edades
La nueva propuesta de calificación por edades contempla las siguientes categorías: «Especialmente recomendado para la infancia», «Apto para todos los públicos (TP)», «No recomendado para menores de 7 años», «No recomendado para menores de 12 años», «No recomendado para menores de 16 años», «No recomendado para menores de 18 años» y «X».
Cada una de estas categorías estará asociada a un código visual específico que se mostrará en pantalla y en la Guía Electrónica de Programación (EPG) para los servicios lineales, y en la ficha de información y/o al inicio del programa para los servicios a demanda.
Cabe destacar que, en el caso de los programas calificados como TP o Infantil, los prestadores podrán decidir si incluir o no la señalización visible en pantalla, aunque deberán mantenerla en la EPG o ficha de información. Además, no será obligatorio el uso de descriptores de contenido para estos programas, ya que se considera que no requieren protección adicional.
Los Descriptores de Contenido y la Desaparición de los Horarios Protegidos
En cuanto a los descriptores de contenido, los prestadores deberán facilitar información «clara, sintética y suficiente» sobre aspectos como violencia, sexo, miedo o angustia, lenguaje, discriminación y drogas y sustancias tóxicas, los cuales serán determinantes para la clasificación por edades.
Uno de los cambios más significativos en esta nueva propuesta es la desaparición de los horarios protegidos para menores. En el antiguo código, existían franjas horarias específicas en las que se restringía la emisión de contenidos no recomendados para determinadas edades. Ahora, este sistema de protección horaria ya no se contempla.
Un Régimen de Infracciones y Sanciones
El nuevo Código de Conducta también establece un sistema de infracciones y sanciones para los prestadores que incumplan los compromisos adquiridos. En primer lugar, se prevé un requerimiento de adecuación de la calificación y/o señalización infractora y, si persiste, una amonestación pública a través de la publicación de la Resolución definitiva del Jurado de Autocontrol.
Además, se contempla la aplicación de multas coercitivas que irán aumentando progresivamente por cada día de incumplimiento de las resoluciones firmes: 200 euros durante la primera semana, 250 euros durante la segunda semana, y 300 euros en las sucesivas semanas.
Consulta Pública y Futuro de la Autorregulación
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha iniciado una consulta pública sobre los sistemas de calificación por edades y descriptores de programas audiovisuales, con el objetivo de adaptar el código de conducta a la nueva Ley General de Comunicación Audiovisual. Esta iniciativa busca recabar los comentarios y aportaciones de los diferentes actores involucrados, incluidos operadores audiovisuales, asociaciones de consumidores y usuarios, investigadores y otros colectivos relacionados con el desarrollo de los menores.
En este contexto, la CNMC pretende alcanzar un acuerdo de corregulación que permita una protección más efectiva de los menores en lo que respecta a la calificación de programas y contenidos audiovisuales. Este nuevo marco regulatorio, resultado de la colaboración entre el sector y las autoridades, representa un avance significativo en la búsqueda de un equilibrio entre la libertad de expresión y la salvaguarda del bienestar de los más jóvenes.