La ciudad de A Coruña se prepara para uno de los juicios más importantes de su historia reciente. El proceso judicial por el asesinato de Samuel Luiz, un joven de 24 años que falleció a causa de una brutal paliza en el paseo marítimo de la ciudad, se llevará a cabo entre el 16 de octubre y el 18 de noviembre en la Audiencia Provincial de A Coruña.
Esta tragedia, que conmocionó a Galicia y a toda España, será objeto de un meticuloso escrutinio por parte de un jurado popular de siete personas, quienes tendrán que responder a un total de 87 cuestiones relacionadas con los hechos.
Además de los cinco acusados directos, dos menores ya fueron condenados previamente por su participación en este crimen. El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha informado que más de 40 personas testificarán durante el juicio, incluyendo a los propios acusados, amigos de la víctima presentes en el lugar de los hechos y ciudadanos senegaleses que intentaron auxiliar a Samuel. Este despliegue de pruebas y testimonios evidencia la minuciosidad con la que se está abordando este caso, que ha conmocionado a la sociedad española.
La Celebración del Juicio
El juicio se llevará a cabo durante un período de aproximadamente un mes, con sesiones diarias de lunes a viernes en horario de mañana. El proceso comenzará el 16 de octubre con los informes y cuestiones previas, seguido de las declaraciones de dos de los acusados, A.M.R. y C.S.B., la única mujer que se sentará en el banquillo. Ese mismo día, también declararán dos amigos de la víctima y los ciudadanos senegaleses que intentaron socorrer a Samuel.
Posteriormente, el juicio continuará con más testificales y otras pruebas hasta el 14 de noviembre, fecha en la que tendrá lugar la declaración de los tres acusados restantes: D.M.M., A.F.G. y K.A.S.C. El 15 de noviembre se llevará a cabo la lectura de los informes finales, dando la oportunidad a los acusados de tomar la última palabra antes de que el jurado popular comience el proceso para emitir su veredicto.
Delitos y Circunstancias Agravantes
El jurado popular deberá determinar si los hechos descritos constituyen un delito de asesinato, como sostienen las acusaciones, además de un posible delito de robo con violencia por la presunta sustracción del móvil de la víctima. Asimismo, tendrá que evaluar si dos de los acusados, D.M.M. y C.S.B., ejecutaron los hechos «por causa de su animadversión hacia la orientación sexual homosexual que le atribuyeron a la víctima», lo que implicaría la agravante de discriminación por condición sexual.
La Fiscalía ha solicitado 25 años de prisión para los dos primeros procesados y 22 años para los otros tres por el delito de asesinato. Además, para uno de los acusados se solicitan cinco años adicionales por el delito de robo con violencia, sumando un total de 27 años de cárcel. Las defensas, la familia de la víctima y la acusación popular ejercida por el colectivo LGTBI Alas Coruña también forman parte del proceso judicial.
En cuanto a las posibles circunstancias eximentes y/o atenuantes, la magistrada presidenta señaló que se deberá establecer, a través de las pruebas presentadas, si tres de los procesados se encontraban en estado de intoxicación por el consumo previo de bebidas alcohólicas o drogas, lo que podría dar lugar a «alguna situación de alteración, disminución o eliminación de su capacidad para formar su voluntad y comprender el alcance de sus actos.