Con el auge de los pagos electrónicos, las tarjetas de crédito y débito se han convertido en herramientas cotidianas para realizar transacciones. Sin embargo, también han aumentado los riesgos de fraude, especialmente a través de una técnica conocida como ‘skimming’, que permite a los delincuentes clonar tarjetas en cuestión de segundos. La Guardia Civil ha emitido alertas y recomendaciones para ayudar a los ciudadanos a protegerse de estas estafas. Hoy, exploraremos las mejores prácticas para evitar ser víctima del ‘skimming’ y otras estafas relacionadas con cajeros automáticos.
3Revisa el cajero automático
Antes de usar un cajero automático, inspecciona el dispositivo con detenimiento. Asegúrate de que no haya elementos extraños o dispositivos adicionales en la ranura donde introduces la tarjeta. Esto incluye no solo el lector de tarjetas, sino también cualquier dispositivo que parezca adherido al cajero. Algunos estafadores colocan dispositivos que parecen parte del cajero pero que en realidad son herramientas de clonación.
Además, verifica que la pantalla y el teclado no presenten signos de manipulación, como marcas, suciedad inusual o daños. Si algo parece fuera de lo normal, es mejor buscar otro cajero. No dudes en informarte sobre los últimos métodos de fraude y cómo reconocerlos; la educación es tu mejor aliada.