Galicia se encuentra en alerta naranja por fuertes lluvias y vientos, mientras que otras trece provincias españolas permanecen en aviso amarillo de la AEMET por precipitaciones, viento y oleaje. La borrasca Aitor continúa afectando al cuadrante noroeste de la península, provocando condiciones meteorológicas adversas.
Lluvias intensas y persistentes en Galicia
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha emitido avisos naranjas por lluvias para las provincias de A Coruña y Pontevedra, donde se esperan las precipitaciones más intensas. Las zonas costeras y las áreas montañosas serán las más afectadas, con riesgo de inundaciones.
Las lluvias también serán localmente fuertes y persistentes en el resto de Galicia, así como en la cordillera cantábrica, el Pirineo central y zonas del interior de Asturias, León y Zamora. En el resto de la mitad noroeste peninsular, las precipitaciones serán menos probables y más débiles.
Fuertes vientos y oleaje en el norte peninsular
Junto a las lluvias, se esperan vientos del suroeste en la Península y Baleares, que serán más intensos en el cuadrante noroeste. Se prevén rachas muy fuertes en el norte de Galicia, la cordillera cantábrica y otras zonas montañosas del norte peninsular.
En el litoral gallego, el oleaje también será intenso, con avisos por mar de fondo en las costas de A Coruña, Lugo y Pontevedra.
Ascenso generalizado de temperaturas y heladas en zonas altas
A pesar del temporal, se espera un ascenso generalizado de las temperaturas, especialmente en las mínimas de la mitad oriental peninsular. Las máximas subirán de forma notable en la fachada cantábrica, el valle del Ebro y zonas del centro peninsular.
En cambio, en las zonas altas del Pirineo se esperan heladas débiles debido a la altitud.
Recomendaciones ante el temporal
Ante esta situación de alerta meteorológica, se recomienda a la población tomar precauciones:
- Extremar la precaución al volante, especialmente en las zonas afectadas por lluvias intensas y fuertes vientos.
- Evitar zonas costeras y áreas propensas a inundaciones.
- Asegurar objetos que puedan salir despedidos por el viento.
- Mantenerse informado a través de los canales oficiales de información meteorológica.