La comunidad empresarial y financiera se encuentra conmocionada por las denuncias presentadas ante la Audiencia Nacional (AN) en relación al presunto fraude de más de 300 millones de euros cometido por Madeira Invest Club, una plataforma de inversiones que prometía a los inversores una forma de reducir su carga tributaria.
Según los documentos presentados, esta compañía, liderada por el CEO Álvaro Romillo, quien se hacía llamar CriptoSpain, habría convencido a más de 27.000 personas para ingresar a su «club privado de inversores», ofreciendo supuestamente «increíbles rendimientos» a través de inversiones en «obras de arte» como relojes, coches de lujo e inmuebles. Sin embargo, tras el cese de sus operaciones, se ha denunciado que este modelo de negocio opaco habría generado un fraude de proporciones aún no cuantificadas, pero que según las primeras estimaciones superaría los 300 millones de euros.
La Denuncia Presentada por Aránguez Abogados
Aránguez Abogados, que representa a más de 500 afectados, ha presentado una denuncia ante la Audiencia Nacional. En ella, se describe cómo Álvaro Romillo, a través de un «discurso persuasivo» y su marca «CriptoSpain», habría logrado convencer a miles de personas para que se unieran a su «Madeira Invest Club», prometiendo «increíbles rendimientos» en base a supuestas inversiones en «obras de arte».
Según la denuncia, este «opaco modelo de negocio» dejó de funcionar hace poco tiempo, y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) emitió una advertencia al público calificándolo como un «chiringuito financiero«. Ahora, las víctimas de esta presunta estafa buscan que la Audiencia Nacional investigue a fondo este caso.
Una Segunda Denuncia en Camino
Además de la denuncia presentada por Aránguez Abogados, el despacho Zaballos Abogados ha anunciado que este mismo martes presentará otra denuncia ante la Audiencia Nacional. Según sus cálculos, el fraude en España superaría las 2.700 víctimas y alcanzaría los 600 millones de euros.
Zaballos Abogados explica que los afectados ingresaban en el «supuesto club financiero de inversores» de Madeira Invest Club, pagando una cuota anual de 2.000 euros. Luego, se les ofrecía todo tipo de «publicidad agresiva y marketing falso» para convencerlos de hacer inversiones que alcanzaban, en promedio, los 100.000 euros.
Algunos de los afectados lograron retirar parte de su dinero, pero la mayoría quedó «atrapada en unas inversiones que no existen» y que evidencian que se trata de una «estafa piramidal«, donde el dinero de los últimos en entrar servía para aparentar rentabilidad a los primeros. Según el despacho, la rentabilidad prometida rondaba el 30%.
En resumen, la investigación sobre el presunto fraude de Madeira Invest Club se encuentra en pleno desarrollo, con las víctimas buscando que la Audiencia Nacional esclarezca en profundidad este caso que ha conmocionado a la comunidad empresarial y financiera española.