Freír huevos puede parecer sencillo, pero las molestas salpicaduras de aceite pueden hacer que esta tarea sea más incómoda de lo que esperabas. Sin embargo, con algunos trucos simples, puedes evitar que el aceite salte y que los huevos se peguen a la sartén. A continuación, te explicamos cómo hacerlo de forma efectiva y segura.
3Controla la temperatura del aceite
A menudo, las salpicaduras ocurren porque el aceite está demasiado caliente. Si el aceite alcanza una temperatura excesiva, al agregar el huevo, la reacción será mucho más brusca, provocando las temidas salpicaduras. Para evitar esto, asegúrate de calentar el aceite a fuego medio, sin dejar que humee. Un truco útil es comprobar la temperatura del aceite antes de añadir el huevo, introduciendo un pequeño trozo de pan: si empieza a dorarse lentamente, el aceite está en su punto. Mantener una temperatura moderada permitirá que el huevo se cocine de forma más controlada, evitando las explosiones y facilitando su cocción uniforme.
Con estos trucos, freír huevos será mucho más sencillo y seguro. Ponlos en práctica y disfruta de tus huevos fritos sin preocuparte por las salpicaduras o que se peguen a la sartén.