El de Aragón fue un fin de semana perfecto, en el que Marc Márquez ganó las dos carreras y se unió a Pecco Bagnaia, Jorge Martín, Enea Bastianini y Maverick Viñales como los únicos que han hecho doblete en la presente temporada.
Pero también fue un fin de semana en el que, indirectamente, salieron a relucir viejas rencillas que darán seguramente mucho que hablar el próximo año, cuando Marc Márquez forme equipo en Ducati con Pecco Bagnaia. El piloto de Turín se fue al suelo tras tocarse con el otro Márquez, Alex, y cargó duramente contra él ante los medios, respaldado por los pilotos formados bajo la tutela de Valentino Rossi.
Marc Márquez arrasa en Aragón y Ducati se frota las manos
Y es que Marc Márquez ha arrasado en Aragón, y la clave ha estado en la pista. Pero no en que las curvas fuesen de izquierdas o derechas, sino en el asfalto. El circuito de MotorLand estaba muy sucio desde la jornada del viernes, y las lluvias que cayeron por la noche tanto el sábado como el domingo hicieron que no se limpiase en ningún momento.
Basta con echarle un vistazo a los datos. En una era de MotoGP en la que se baten todos los récords, la pole de Márquez en MotorLand fue siete décimas más lenta que la de Pecco Bagnaia hace dos años en este mismo circuito. En la carrera del domingo, Marc Márquez fue doce segundos más lento que el ganador de 2022, Enea Bastianini. La pista tenía cero agarre. De repente, en un circuito sucio sin nada de agarre, Márquez arrasó. El problema es que son condiciones que no se habían dado en toda la temporada, y difícilmente se repitan.
«Estuvo extraordonario»
«En un fin de semana muy complicado por las condiciones del nuevo asfalto de la pista aragonesa, triunfó un extraordinario Marc Márquez, que corrió con una naturalidad y confianza desarmantes: clase cristalina aplicada a una determinación digna de una apisonadora», arranca el director general de Ducati, D’all Igna.
«Dominó literalmente todo el fin de semana, cuyo desenlace nunca estuvo en duda, dejado claro desde los primeros entrenamientos libres. Fue la mejor manera de celebrar el regreso de un campeón a la victoria, su primera en Ducati, y tras el amargo epílogo del domingo, regalarnos una sonrisa de alegría», mantiene el jefe de Duacti.