La población gitana en España se enfrenta a una inequidad preocupante en el acceso al Ingreso Mínimo Vital (IMV), a pesar de cumplir con los requisitos para ser beneficiarios de esta prestación. Un reciente estudio realizado por la Fundación Secretariado Gitano (FSG) revela cifras alarmantes sobre la baja cobertura del IMV entre este colectivo.
Según el informe, el 71% de la población gitana en España no accede al IMV a pesar de cumplir con los requisitos. En comparación, la cobertura estimada para el conjunto de la población en situación de pobreza es del 35%. Esta brecha es un claro indicador de las barreras que enfrentan las personas gitanas para acceder a esta ayuda fundamental.
Barreras en el Acceso al Ingreso Mínimo Vital
El estudio identifica diversas barreras que impiden a la población gitana beneficiarse plenamente del IMV. Entre ellas se encuentran la falta de información, dificultades con la documentación requerida, largos periodos de tramitación y la brecha digital, que dificulta aún más el proceso de solicitud y gestión de la prestación.
Estas limitaciones se traducen en una tasa de non take up (quienes, cumpliendo los requisitos, no acceden a la prestación) del 71% entre la población gitana, muy por encima del 58% estimado para el conjunto de la población en exclusión social.
Impacto Limitado del IMV en la Pobreza Gitana
A pesar de que el IMV contribuye a reducir la intensidad de la pobreza en la población gitana, el estudio revela que no logra disminuir la incidencia de la pobreza en este colectivo. De hecho, el informe señala que el IMV apenas afecta a la pobreza severa y, en ningún caso, saca del riesgo de pobreza a las familias gitanas beneficiarias.
Además, el 82% de los perceptores del IMV no ha recibido apoyo para buscar empleo, y solo el 12% de los hogares con menores han recibido apoyo educativo. Esto pone en evidencia que la actual configuración del IMV no garantiza medidas de activación y acompañamiento social que faciliten la inclusión laboral y educativa de las familias gitanas.
En resumen, el estudio de la Fundación Secretariado Gitano revela una grave inequidad en el acceso y el impacto del Ingreso Mínimo Vital entre la población gitana en España. Urge implementar estrategias efectivas para ampliar la cobertura de esta prestación y adaptarla a las necesidades específicas de las familias gitanas, con el fin de reducir la pobreza y promover su inclusión social, educativa y laboral.