La crisis política y económica que atraviesa Baleares ha puesto en el centro del debate público la negociación de los próximos presupuestos del Govern. En este escenario, el papel del partido de extrema derecha Vox se torna cada vez más relevante, con posturas firmes y exigencias claras.
Vox y los Acuerdos de Gobierno con el PP
La portavoz de Vox en el Parlament balear, Manuela Cañadas, ha dejado en claro que la dirección nacional del partido marcará la postura a seguir en la votación de las cuentas públicas. Según Cañadas, hasta el momento se ha cumplido aproximadamente el 50% del acuerdo de gobierno alcanzado con el PP, y cuando se trate de los presupuestos, recibirán «instrucciones» de la cúpula del partido.
Cañadas ha señalado que los acuerdos de gobierno con el PP se rompieron a raíz del incremento de llegadas de migrantes a Canarias y por la negociación con el PSOE para redistribuirles por la península, algo que, a su juicio, supone un «peligro para las arcas públicas».
Proposición No de Ley (PNL) contra la Acogida de Migrantes
En este contexto, Vox ha presentado una PNL que se debatirá en las distintas Cámaras del Estado, con la que se plantea expresar el rechazo a la política de «puertas abiertas promovida desde la UE» y «respaldada por el PP y PSOE». La formación también reclama la expulsión «inmediata» de todos los «inmigrantes ilegales» presentes en Baleares, expresa su «oposición» a la apertura de nuevos centros de acogida y pide el cierre de los ya existentes.
Asimismo, piden retirar fondos públicos a ONGs y asociaciones que colaboren con «redes de tráfico de personas» y destinar los recursos públicos usados para su acogida a la «repatriación de inmigrantes ilegales a sus países de origen o, alternativamente, a Bruselas». Igualmente solicitan la convocatoria de una consulta popular sobre el «refuerzo de la seguridad ciudadana» y la «expulsión de los inmigrantes ilegales».
Posición de Vox en el Consell de Mallorca
Interrogada por si Vox también planteará una PNL en este sentido en el Consell de Mallorca, donde todavía mantiene representantes y gestiona la acogida de menores migrantes no acompañados en la isla, Cañadas no ha aclarado este extremo, pero ha recalcado que se exige el «cierre de todos los centros en territorio nacional».
Por otro lado, ha anunciado que pedirán explicaciones a la Conselleria de Educación y Universidades para saber si ha informado «debidamente» o si ha hecho alguna campaña sobre el plan de elección de lengua entre las familias.
En resumen, Vox se perfila como un actor clave en la negociación de los próximos presupuestos del Govern balear, con posiciones firmes y exigentes, especialmente en lo que respecta a la política de acogida de migrantes. La formación de extrema derecha parece dispuesta a utilizar todos los recursos a su alcance para imponer su agenda en la región.