Si buscas un pueblo en España con una historia que te transporta a épocas medievales, no busques más: Alarcón en Cuenca es el lugar ideal. Este pequeño pueblo, con menos de doscientos habitantes, ofrece una experiencia única que combina patrimonio histórico, arquitectura impresionante y una atmósfera encantadora. A continuación, te presentamos los aspectos más fascinantes de Alarcón para que no te pierdas nada durante tu visita.
3Gastronomía y alojamiento con encanto
Alarcón no solo seduce con su historia, sino también con su oferta gastronómica y de alojamiento. El Parador de Alarcón, situado en el antiguo castillo, es la mejor opción para una experiencia completa. Su restaurante ofrece platos tradicionales como el morteruelo y el lomo a la orza, además de un menú especial con helado de queso. Si prefieres un ambiente más informal, La Cabaña de Alarcón, cerca de la Iglesia de Santa María, sirve deliciosas sopas y quesos fritos, acompañados de vinos locales de la Ribera del Júcar.
Alarcón es un destino perfecto para quienes buscan sumergirse en la historia y disfrutar de la tranquilidad de un pueblo rural. Con su impresionante castillo, su patrimonio religioso y su exquisita gastronomía, este rincón de Cuenca te ofrecerá una experiencia inolvidable. ¡No te lo pierdas!