Attaoui explica que tendrá que cambiar de hábitos para mejorar
Mohamed Attaoui es uno de los dos atletas españoles que ha logrado subir al podio en una reunión de la Diamond League 2024, gracias a su segundo lugar en los 800 metros en Mónaco. Adel Mechaal también destacó al alcanzar el tercer puesto en la milla de Londres una semana después. Sin embargo, Attaoui no participará en las finales de la competición que se celebrarán este fin de semana en Bruselas.
El atleta cántabro ha experimentado un notable despegue tanto dentro como fuera de la pista esta temporada, alcanzando logros que parecían casi inalcanzables hace apenas 11 meses. En ese entonces, se mudaba a la fría St. Moritz, Suiza, para entrenar bajo la dirección de Thomas Dreissigacker como parte del formidable OAC Europa, con el que firmó un contrato de dos años más una opción adicional.
Attaoui admite que es muy ambicioso
«Soy una persona muy ambiciosa, y al inicio de la temporada tenía claro que quería estar presente en todas las competiciones importantes: el Mundial de pista cubierta, el Europeo y los Juegos Olímpicos. Aunque muchos me decían que con repetir el nivel de 2023, cuando casi llegué a la final del Mundial de Budapest en mi debut en un gran campeonato, sería suficiente, yo no estaba de acuerdo», explicó el atleta.
«Decidí seguir esforzándome para mejorar continuamente. Por eso, también tomé la decisión de unirme a un grupo profesional, con la intención de tener a diez compañeros que me exigieran al máximo. Además, era la primera vez que tenía la oportunidad de competir en unos Juegos Olímpicos, algo con lo que cualquier deportista sueña», contaba.
El atleta cambiará de hábitos para llegar a la cima
Attaoui admite que sus hábitos no son precisamente los mejores. Y es por eso por lo que ha decidido cambiar de hábitos para poder llegar a lo más alto del deporte. «Thomas enfatiza constantemente la importancia del descanso, ya que tiendo a ser algo desorganizado en ese aspecto. Aunque cuido mucho mi alimentación y los suplementos, el descanso es un área en la que tengo dificultades».
«No es que no duerma bien, sino que a menudo me acuesto muy tarde, incluso llegaba a entrenar sin haber desayunado. Conociendo esta situación, Thomas me regaló un reloj que monitorea mis horas de sueño. En ocasiones, cuando me iba a la cama después de medianoche, quitaba el reloj para evitar que me reprendiera, pero él insistía en que lo usara. Reconozco que en este aspecto aún tengo margen de mejora, y cada pequeño ajuste cuenta«, terminaba explicando.