En un discurso lleno de convicción y optimismo, el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha hecho un llamado a la ciudadanía catalana para que se comprometa en la tarea de acoger e integrar a las personas migrantes que llegan a la región. Según Illa, esta integración no solo no pone en riesgo la identidad catalana, sino que la enriquece, aportando una diversidad cultural que fortalece a la sociedad.
Durante la inauguración de la sede de la Escola de Noves Oportunitats de la Garrotxa, Noima, en Olot (Girona), junto a la consellera de Educación y Formación Profesional, Esther Niubó, Illa resaltó el compromiso político, educativo, social, empresarial y sindical de las diferentes instituciones y entidades involucradas en este proyecto, que comenzó en 2018 y finalizó en 2024. Según el presidente, este compromiso constante y paciente es clave para lograr una verdadera acogida e integración de los migrantes, enriqueciendo a toda la sociedad en el proceso.
LA EXCELENCIA EDUCATIVA COMO PILAR
Uno de los objetivos prioritarios del Govern, según Illa, es lograr la «excelencia educativa« y explorar formas de mejorar el sistema educativo catalán. El presidente enfatizó que un sistema educativo no puede funcionar si no se ocupa de todos los alumnos y no es capaz de dar respuesta a las necesidades de cada uno. En este sentido, Illa insistió en la importancia de «no dejar a nadie atrás», lo cual considera un indicador moral fundamental de cómo se construye una sociedad justa e inclusiva.
EL COMPROMISO DE TODOS
Illa hizo hincapié en que la responsabilidad de acoger e integrar a los migrantes es compartida por todos los sectores de la sociedad: la administración, las entidades, las empresas y los sindicatos. Según el presidente, este compromiso debe manifestarse a través de una actitud de constancia, paciencia y tenacidad, para lograr que Cataluña se convierta en un hogar acogedor y lleno de oportunidades para quienes deciden hacer de esta región su nuevo destino.
UNA VISIÓN DE FUTURO
Al concluir su discurso, Illa expresó su convicción de que la integración de los migrantes no solo es un deber moral, sino una oportunidad para enriquecer la sociedad catalana. Al abrazar la diversidad y brindar herramientas para la inclusión, Cataluña se posiciona como un modelo de integración, proyectando una imagen de apertura y progreso que fortalecerá su posición en el contexto global. Con este mensaje, Illa deja claro que la integración de los migrantes es una prioridad estratégica para el Govern, y que solo mediante el esfuerzo conjunto de toda la sociedad se podrá alcanzar este objetivo fundamental.