En un momento crucial para la izquierda transformadora, Compromís y Nueva Canarias (NC) han unido sus voces para plantear un análisis profundo y pragmático del papel que deben desempeñar en la reconfiguración de la izquierda a nivel territorial. Ambas formaciones comparten la preocupación por el avance de la derecha neoliberal y conservadora en la región, lo que les ha llevado a intensificar su colaboración para enfrentar los desafíos más apremiantes.
Vicent Marzà, eurodiputado de Compromís, ha expresado la necesidad de «liderar la reconfiguración de la izquierda en Canarias y en el País Valencià con una apuesta clara por la justicia social, la sostenibilidad y el respeto a las singularidades territoriales«. Este proceso, según Marzà, no se limita a la arena política institucional, sino que también implica el fortalecimiento de los vínculos con la sociedad civil, la cultura y los medios de comunicación.
Revertir el Ciclo Conservador
Compromís y NC coinciden en que el Partido Popular en las Islas Canarias y el País Valencià ha comenzado a implementar medidas que solo benefician a las élites, como la eliminación de impuestos a los más ricos o los recortes en áreas clave como educación, sanidad y dependencia.
En respuesta a esto, ambas formaciones se han comprometido a «construir espacios de entendimiento con todos aquellos actores dispuestos a revertir este ciclo conservador, siempre desde la obediencia territorial y respetando la pluralidad de nuestros pueblos».
Marzà ha afirmado que Compromís cree poder contribuir a esta transformación, ya que comparten «una larga historia de lucha por la soberanía, la justicia social y la igualdad, tanto a nivel local como europeo».
Afrontar la Crisis de Vivienda y la Masificación Turística
Paralelamente, Compromís y NC han reforzado su alianza para abordar medidas urgentes ante retos como la crisis de la vivienda y los efectos del turismo de masas. Marzà ha viajado a Canarias para reunirse con representantes de la sociedad civil, ONG y colectivos sociales con el objetivo de analizar la crisis habitacional y los efectos del turismo de masas.
En su visita, Marzà abogó por la implementación de una tasa turística, una moratoria de nuevas plazas turísticas y un control más estricto sobre el alquiler vacacional. «Es imprescindible poner fin al modelo turístico de masas. Estamos viendo un crecimiento descontrolado de la presión turística que está expulsando a los residentes de sus hogares«, reivindicó.
Además, Marzà se mostró partidario de impulsar medidas urgentes como limitar la compra de viviendas por parte de extranjeros no residentes como una primera estrategia para proteger el derecho a la vivienda de la población local. «La especulación no puede estar por encima de un derecho fundamental como es acceder a un hogar –defendió–. Es el momento de pararle los pies a los fondos buitre y a los especuladores y cumplir con el artículo 47 de la Constitución».