Miquel Roca defiende la vigencia de la Constitución: «No es el problema, es todavía la solución»

La Constitución Española de 1978 sigue siendo la solución a los desafíos de la justicia, según el destacado abogado y expolítico Miquel Roca. En su intervención en la inauguración del curso de verano de la UNIA, Roca, uno de los ‘padres’ de la Carta Magna, destacó que la justicia «emana del pueblo» y «se aplica en nombre del pueblo», a diferencia de otros poderes.

El expolítico ha reafirmado que la Constitución de 1978 definió la justicia como uno de los «cuatro valores fundamentales» que deben inspirar el ordenamiento jurídico y la convivencia en España. Asimismo, ha insistido en que la Carta Magna «proclamó la justicia como un valor a respetar y que debe condicionar, orientar e inspirar todo el sistema de convivencia».

LA JUSTICIA Y EL PODER JUDICIAL EN LA CONSTITUCIÓN

Roca ha destacado que, si bien la Constitución definió estos principios en 1978, «tienen plena vigencia en la actualidad». En este sentido, ha afirmado que es necesario «construir un nuevo modelo» y «reflexionar sobre el modelo judicial en Andalucía y en España, incluyendo una versión más europea».

El expolítico se ha referido al discurso de la nueva presidenta del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Isabel Perelló, en su toma de posesión, señalando que «sus palabras encajan con los términos en los que la justicia es tratada en nuestra Constitución». Por lo tanto, ha defendido que «la Constitución no es el problema, en la Constitución está la solución».

Roca también ha resaltado que existe una «judicialización de la política que tiene consecuencias prácticas en el campo de trascender la resolución judicial a un impacto político», aunque, ha añadido, «el origen no es la politización de la justicia, sino la judicialización de la política». Además, ha señalado que la justicia «sufre la agresividad de una sociedad polarizada» y que los retrasos judiciales «no sirven a la causa de una justicia contemporánea».

LA JUSTICIA EN EL ÁMBITO EUROPEO

El padre de la Carta Magna ha advertido de que «hay muchos tribunales europeos que tienen competencias sobre nosotros» y ha puesto en aviso en cuanto a la necesidad de «construir un modelo judicial europeo que tenga una coordinación. De igual modo, ha agregado que «es un momento para tomarnos muy en serio a Europa porque la necesitamos, y sin una Europa potente y fuerte somos muy pequeñitos en el mundo, pero tiene que construirse sobre bases muy claras y nuevas.

Roca también ha abogado por la necesidad de alcanzar «un gran pacto sobre la justicia que garantice el Estado de Derecho». «Nadie puede justificar una negativa a construir un sistema judicial que sea más fiel a la vocación del Estado de Derecho. Si no somos capaces de construir un acuerdo alrededor de un tema como este, es que no nos tomamos muy en serio la importancia de un sistema democrático», ha asegurado.

Además, el exlíder de Convergència i Unió ha insistido en que «democracia y Estado de Derecho son una misma cosa» y ha reclamado que «un Estado de Derecho se construye con un sistema judicial al que el ciudadano valore y respete y no le podemos exigir a veces a los ciudadanos que respeten más el Poder Judicial».

En conclusión, el destacado abogado y expolítico Miquel Roca ha defendido firmemente la vigencia de la Constitución Española de 1978 como la solución a los desafíos de la justicia en España, destacando la importancia de la justicia como valor fundamental y la necesidad de construir un modelo judicial más cercano a la ciudadanía y adaptado a los retos europeos.