En los últimos meses, el crecimiento salarial en el Reino Unido ha experimentado una notable desaceleración, reflejando un panorama económico dinámico y cambiante. Los datos más recientes de la Oficina Nacional de Estadística (ONS) revelan que el aumento anual de los ingresos regulares de los trabajadores, excluyendo pluses, fue del 5,1% entre mayo y julio, lo que representa una disminución respecto al 5,4% observado entre abril y junio.
Este descenso en el crecimiento salarial se enmarca en un contexto más amplio de evolución de la economía británica. La tasa de desempleo se ha reducido en dos décimas, situándose en el 4,1% en el trimestre hasta julio, mientras que la tasa de ocupación se ubicó en el 74,8%, medio punto más que hasta junio.
La Evolución de los Salarios Básicos y Totales
Según los datos publicados por la ONS, el alza anual de los ingresos totales, incluyendo bonificaciones, fue del 4%, lo que representa una disminución de seis décimas en comparación con el periodo inmediatamente anterior. Esta desaceleración se debe, en parte, a los pagos únicos efectuados a muchos trabajadores del sector público en junio y julio del año pasado, que han condicionado las cifras actuales.
Además, el crecimiento de los salarios básicos también ha seguido desacelerándose, aunque de forma menos acusada. Liz McKeown, directora del área de estadística económica de la ONS, ha explicado que «el crecimiento de los salarios totales ha vuelto a ralentizarse notablemente, ya que los pagos únicos efectuados a muchos trabajadores del sector público en junio y julio del año pasado siguen condicionando las cifras».
El Impacto de la Inflación en el Poder Adquisitivo
Teniendo en cuenta la evolución del Índice de Precios al Consumo (IPC), los empleados británicos vieron revalorizados sus salarios un 3% entre el quinto y séptimo mes del año, lo que representa una disminución respecto al 3,2% previo. Esta reducción en el poder adquisitivo de los trabajadores refleja la persistencia de la inflación en el Reino Unido, un fenómeno que está erosionando el poder de compra de los hogares.
La desaceleración del crecimiento salarial y la erosión del poder adquisitivo de los trabajadores plantean desafíos importantes para la economía británica. En un contexto de incertidumbre económica global, es fundamental que las autoridades y las empresas trabajen de manera conjunta para encontrar soluciones que permitan mejorar las condiciones laborales y el bienestar de los trabajadores.