Hablar de rehabilitación de un edificio da pie a que los propietarios crean que tendrán que desembolsar una gran cantidad de dinero para llevarla a cabo.
Sin embargo, un tipo de renovación puede tener un precio mucho más asequible según cómo lo hagas. Nos referimos a la rehabilitación energética.
Hoy hablaremos de este proceso por el que pasan no solo los propietarios, sino también los técnicos y administradores de fincas.
En concreto, averiguaremos exactamente qué es la rehabilitación energética, así como los motivos que dan pie a que sea tan asequible.
En qué consiste la rehabilitación energética de un edificio
Todo edificio, inevitablemente, emite a la atmósfera una mayor o menor cantidad de dióxido de carbono.
Pero, ¿sabías que se puede reducir de forma significativa?
En efecto, para lograrlo solo necesitas rehabilitarlo energéticamente.
En concreto, se trata de un proceso que se centra en proporcionar a los propietarios las capacidades necesarias para hacer uso de energías renovables.
Adicionalmente, con los cambios introducidos por expertos en la materia como los de Envoltia, la rehabilitación energética del edificio también deriva en que no haya tanta demanda de elementos contaminantes como la luz y el gas.
Beneficios de la rehabilitación energética
Depositando la confianza en una empresa especializada como la que acabamos de mencionar, no tardan en evidenciarse los beneficios de la rehabilitación energética, empezando precisamente por la menor contaminación.
Esto es muy positivo no solo para quienes residen en el edificio en cuestión, sino también para el resto del planeta.
Y es que el ecosistema sufre mucho menos al reducirse significativamente la cantidad de energía consumida.
Rehabilitar energéticamente un edificio se traduce en que, en términos de eficiencia, mejore de manera considerable.
Por ende, se ve reducido el importe a pagar mensualmente por las facturas de luz, gas y agua.
Al no tener que pagar tanto dinero como antes, los propietarios pueden disfrutar siempre de la temperatura idónea.
En definitiva, el bienestar hogareño poco o nada tiene que ver con el de antaño.
Los futuros compradores o inquilinos serán conscientes de todos los beneficios que obtendrían en caso de dar el paso de vivir en un edificio que recientemente ha sido rehabilitado a nivel energético.
Es por este motivo que dichas viviendas se revalorizan.
Subvenciones de la Unión Europea
Tal vez creas que obtener todos estos beneficios supone gastar muchísimo dinero, pero nada más lejos de la realidad.
Afortunadamente, el desembolso a realizar es muy asequible gracias en gran medida a las subvenciones de la Unión Europea.
El principal objetivo de esta entidad geopolítica consiste en reducir drásticamente la contaminación de los edificios residenciales, beneficiando así al ecosistema.
Para lograrlo, impulsa económicamente a las comunidades de propietarios, dando pie a que el importe a pagar sea muy inferior.
El problema de estas ayudas europeas es que la comunidad tiene que adelantar el dinero para poder hacer frente a la inversión. Lo que dificulta aún más la ejecución de las obras.
Ante esto, Envoltia ofrece a las comunidades la posibilidad de no adelantar el dinero de la subvención.
En su lugar, contractualmente se estipula que al recibir la ayuda es cuando se abona a la empresa que se encarga de la rehabilitación energética: Envoltia.
Pero, ¿qué pasa con la parte no subvencionable?
Quizá pienses que acarrea derramas, pero afortunadamente no es así.
Esto es debido a que Envoltia financia la totalidad de esa parte que no puede ser subvencionada.
A pesar de la financiación, cada propietario debe pagar la parte no subvencionable.
No obstante, a la hora de hacerlo no surge ninguna dificultad, ya que se paga sobradamente con el ahorro mensual que proporciona la instalación.
Para las comunidades de vecinos, el hecho de no tener que afrontar derramas previas supone un enorme alivio, así como una impagable comodidad en términos monetarios.
La rehabilitación energética de tu edificio merece muchísimo la pena ya que, tras finalizar el proceso, los propietarios pasan a pagar bastante menos en consumos.
Así es el proceso de principio a fin
Con tal de que la Unión Europea conceda la subvención y el importe a pagar por la rehabilitación energética sea extremadamente asequible, es esencial que el proceso tenga lugar siguiendo los pasos que mencionaremos a continuación.
En primer lugar, hay que monitorizar el edificio para saber cuáles son sus carencias.
Con una auditoría energética se detallan claramente los problemas a abarcar, así como las soluciones.
Después empiezan a ejecutarse las obras, empezando por aquellas que disminuyen la demanda energética.
A continuación, las instalaciones pasan a ser renovadas al mismo tiempo en que se mejora su eficiencia.
Entonces, los profesionales hacen los cambios oportunos con tal de que el edificio pueda autoabastecerse con la energía propia y renovable.
Aunque no en todos los casos es así, en líneas generales el siguiente paso se resume en instalar cargadores para los vehículos eléctricos. Independientemente de si se lleva a cabo o no esta acción, siempre se efectúa una monitorización final.
Por último, los sensores permiten a los propietarios gestionar de forma óptima su energía.