En un momento de tensión política y económica, las palabras pronunciadas por la portavoz de la Ejecutiva federal del PSOE, Esther Peña, han desatado una ola de indignación en la región de Teruel. Tomás Guitarte, portavoz del grupo parlamentario Aragón-Teruel Existe, ha salido al paso para denunciar la «miserable» comparación que Peña estableció entre las ayudas al funcionamiento para Teruel y el acuerdo de financiación privilegiada alcanzado con ERC para la investidura de Illa.
Guitarte ha dejado claro que las ayudas específicas para zonas despobladas como Teruel, Soria y Cuenca no pueden ser calificadas de «financiación singular». Estas ayudas, que suponen una rebaja del 1% de la cuota a Seguridad Social para las empresas que se radiquen en estas provincias, representan un monto anual de 8,5 millones de euros para toda la provincia de Teruel. En contraste, el acuerdo con ERC implica un desvío de 22.000 millones de euros al año de las arcas públicas hacia la Hacienda catalana, además de la condonación de deuda.
EL ACUERDO CON ERC: UN PRIVILEGIO EXORBITANTE
Guitarte ha sido enfático al señalar que «comparar esos 22.000 millones al año que pasarán a la Hacienda catalana con 8,5 millones de las ayudas a Teruel como mínimo se puede calificar de miserable». Estas cifras ponen de manifiesto la enorme disparidad entre el trato recibido por Cataluña y el otorgado a las regiones más castigadas por la despoblación. Mientras que Cataluña obtiene un acuerdo de financiación privilegiada, Teruel y otras provincias luchan por sobrevivir con ayudas modestas.
El diputado aragonés ha exigido al Gobierno que cumpla con el acuerdo alcanzado en la pasada legislatura con Teruel Existe, elevando las ayudas al 20% y dejando de «marear la perdiz» cuando le conviene. Guitarte ha sido categórico al afirmar que si su formación no está presente en el Parlamento, «difícilmente ese compromiso se va a cumplir».
LA COMPARACIÓN «MISERABLE» DEL PSOE
Guitarte no ha dudado en calificar de «miserable» los argumentos esgrimidos por el PSOE para intentar justificar su posición. Ha acusado al partido de «privilegiar a los ya privilegiados» y de «intentar confundir a la opinión pública» con declaraciones como las de Esther Peña.
La comparación realizada por la portavoz del PSOE, que equiparaba las ayudas a Teruel con el acuerdo de financiación a Cataluña, ha sido interpretada como un intento de minimizar las problemáticas enfrentadas por las regiones despobladas y de desviar la atención hacia un supuesto favoritismo.
Guitarte ha sido claro al señalar que esta actitud del PSOE es «muy poco defendible incluso entre sus propios correligionarios». La evidente disparidad entre las cantidades destinadas a Cataluña y a Teruel pone en evidencia la necesidad de un trato más justo y equitativo para las regiones más desfavorecidas.
