El portavoz y vicesecretario de Cultura del Partido Popular (PP), Borja Sémper, ha explicado que su formación solo apoyará la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) para regularizar de forma extraordinaria a 500.000 migrantes, si se tienen en cuenta sus propuestas. Estas incluyen analizar «caso por caso» y no regularizar a quienes tengan antecedentes penales.
Según Sémper, el PP quiere que este proceso de regularización sea «técnicamente riguroso» y que «atienda la realidad socioeconómica» de los cientos de miles de personas en España que necesitan una respuesta. Así, el partido se ha pronunciado a favor de una «migración ordenada» y un «trato humanitario para los inmigrantes«, pidiendo al Gobierno que declare un «plan de emergencia en materia migratoria.
EL PP ACUSA AL GOBIERNO DE «NO TENER POLÍTICA MIGRATORIA»
El portavoz del PP ha acusado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de «no tener política migratoria» y ha dicho que «solo faltaría que la responsabilidad fuera del Partido Popular«. Sémper ha subrayado que su partido tiene una «posición en materia migratoria tradicionalmente conocida«, enfatizando la necesidad de «control de nuestras fronteras«.
Además, ha pedido al Gobierno que tenga en cuenta las propuestas del PP en materia de migración y no solo haga «caso a los independentistas«. Sémper ha advertido que si no se tienen en cuenta estas propuestas, «el Partido Popular no llegará a ningún acuerdo«, no por una «cuestión de prurito político«, sino porque consideran que lo que están proponiendo es «lo que España y el conjunto de los españoles necesitan«.
EL RIESGO DE UN ACUERDO FALLIDO
Finalmente, Sémper ha criticado que el Gobierno «vive ensimismado y es incapaz de dar respuestas a los problemas extraordinarios que tiene este país«. Por lo tanto, si el Ejecutivo no atiende las demandas del PP, «el Partido Popular no la apoyará» y no habrá «una buena ley» para regularizar a los 500.000 migrantes.
En resumen, el Partido Popular condiciona su apoyo a la ILP de regularización migratoria a que se tengan en cuenta sus propuestas, como analizar «caso por caso» y excluir a quienes tengan antecedentes penales. Además, acusan al Gobierno de «no tener política migratoria» y piden que se consideren las posiciones del PP, advirtiendo que de lo contrario no llegarán a ningún acuerdo.