La Comunidad Autónoma de Extremadura ha demostrado una vez más su compromiso con la protección y el bienestar de los más vulnerables, al acoger a dos menores migrantes procedentes de Ceuta en su sistema de protección. Esta acción ejemplifica la solidaridad que caracteriza a esta región española, que se ha convertido en un referente en la atención a las necesidades de los menores migrantes.
La consejera de Salud y Servicios Sociales, Sara García Espada, ha sido enfática al expresar la posición de Extremadura ante esta situación. Ha insistido en que el Gobierno central establezca las medidas y la consignación presupuestaria necesarias para desarrollar una «política migratoria adecuada», reconociendo que los recursos disponibles actualmente son insuficientes para atender a todos los menores migrantes que llegan a la región.
EXTREMADURA, UNA TIERRA SOLIDARIA
Extremadura se ha caracterizado por su solidaridad y compromiso con la atención a los menores migrantes. Según explicó la consejera, al recibir la petición de ayuda del Gobierno de Ceuta, la Comunidad Autónoma respondió con la acogida de estos dos menores, quienes fueron integrados en el sistema de protección autonómico desde el pasado miércoles.
Además, Extremadura se comprometió en el pasado Consejo Interterritorial de Salud, celebrado en julio, a aceptar el plan de respuesta para este año, que suponía la llegada de 30 menores migrantes desde Canarias. Esta decisión demuestra la voluntad de la región de asumir su responsabilidad y contribuir a la atención de estos jóvenes en situación de vulnerabilidad.
Sin embargo, la consejera ha reiterado la necesidad de que el Gobierno central proporcione los recursos necesarios para atender adecuadamente a los menores migrantes. Actualmente, los fondos disponibles solo cubren el primer año de acogida, lo que supone un reto para garantizar la protección a largo plazo de estos menores.
LA IGUALDAD DE CONDICIONES, UN PRINCIPIO FUNDAMENTAL
Otro aspecto destacado por la consejera de Salud y Servicios Sociales es la importancia de proteger en igualdad de condiciones a los menores migrantes, independientemente de su clasificación inicial como menores o mayores de edad. Según explicó, aquellos que llegan con la calificación de menores y los que posteriormente son determinados como menores por la Fiscalía, deben recibir el mismo trato y acceso a los sistemas de protección.
Esta posición refleja el compromiso de Extremadura por garantizar el respeto a los derechos y la dignidad de todos los menores migrantes, independientemente de su situación administrativa. La igualdad de condiciones es un principio fundamental que la Comunidad Autónoma está decidida a defender y aplicar en la atención a estos jóvenes.
En resumen, la acogida de los dos menores migrantes procedentes de Ceuta por parte de Extremadura demuestra la solidaridad y el compromiso de esta región con la protección de los más vulnerables. Sin embargo, la consejera ha hecho un llamado al Gobierno central para que proporcione los recursos y el apoyo necesarios para desarrollar una política migratoria adecuada y garantizar la igualdad de condiciones en la atención a todos los menores migrantes que llegan a la Comunidad Autónoma.