La evolución del Índice de Precios de Consumo (IPC) en España ha sido un tema de gran relevancia en los últimos meses, especialmente dado el impacto que tiene en el poder adquisitivo de los ciudadanos. En este contexto, el vicesecretario de Economía del Partido Popular (PP), Juan Bravo, ha expresado su profunda preocupación por el último dato conocido del IPC, que en agosto bajó seis décimas y se situó en un 2,2% interanual.
Bravo ha señalado que desde que Pedro Sánchez asumió la presidencia del Gobierno, los precios en España han subido un 19%, lo que, a su juicio, evidencia que los españoles son «más pobres que hace un año». Además, ha resaltado que, si se analiza específicamente el incremento de los precios de la alimentación, este alcanza más de un 35%.
LA PÉRDIDA DE PODER ADQUISITIVO DE LOS ESPAÑOLES
Según el diputado del PP, el hecho de que los precios hayan subido durante estos años, mientras que el Ejecutivo «se ha negado a deflactar el IRPF«, ha provocado que los españoles hayan perdido poder adquisitivo. Bravo ha criticado que, cuando el Gobierno tiene que elegir entre mejorar el poder adquisitivo de los ciudadanos o recaudar, siempre opta por la segunda opción, «para pagar el precio político a sus socios» y que Sánchez siga en el Gobierno.
LA IMPORTANCIA DE FRENAR EL CRECIMIENTO DE LOS PRECIOS
La preocupación expresada por Juan Bravo refleja la importancia que tiene para los españoles frenar el crecimiento de los precios, especialmente en un contexto económico desafiante. La pérdida de poder adquisitivo derivada de la inflación es una realidad que afecta a la calidad de vida de los ciudadanos y que, según el vicesecretario de Economía del PP, el Gobierno no ha sabido abordar de manera eficaz.
En este sentido, el debate sobre las medidas necesarias para contener la inflación y proteger el poder adquisitivo de los españoles se perfila como un tema central en la agenda política y económica del país.