La Comisión Nacional de los Mercados de Valores (CNMV) ha decidido levantar la suspensión de cotización de Talgo con efectos a partir de las 14.45 horas de este martes, después de que el Gobierno haya confirmado su veto a la Oferta Pública de Adquisición (OPA) presentada por el grupo húngaro Magyar Vagon para hacerse con el 100% de Talgo.
Coincidiendo con el arranque de la rueda de prensa del Consejo de Ministros de este martes, y antes de ninguna confirmación pública por parte del Gobierno, la CNMV decidió suspender la cotización de Talgo con efectos inmediatos. Tras las explicaciones del Gobierno, la CNMV ha decidido levantar esta suspensión y la compañía volverá a cotizar a partir de las 14.45 horas.
El Veto Gubernamental por Razones de «Seguridad Nacional»
La Junta de Inversiones Extranjeras del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa ha denegado la operación aludiendo a razones de seguridad nacional, según confirmaron a Europa Press en fuentes del Gobierno. En un comunicado oficial posterior, el Gobierno se limita a argumentar que ha tomado esta decisión porque su autorización «conllevaría riesgos para garantizar la seguridad nacional y el orden público». De hecho, el Consejo de ministros ha declarado la información contenida en este expediente como clasificada.
El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ya anticipó el pasado mes de marzo que el Gobierno haría «todo lo posible» para frenar esta operación, por temores a los posibles vínculos de la empresa húngara con la Rusia de Putin y la extrema derecha.
En concreto, el 45% del capital del consorcio húngaro que pretendía comprar Talgo está controlado por Corvinus, un fondo estatal húngaro, país ahora gobernado por Viktor Orbán, quien recientemente ha entrado en conflicto con la propia Unión Europea por su acercamiento unilateral a Rusia y su oposición a aceptar cuotas de refugiados.
Además, la Junta de Inversiones Extranjeras ha argumentado razones de seguridad nacional, en línea con el mensaje que ya lanzó Puente en abril, al decir que esta OPA planteaba un problema estratégico porque Talgo tiene tecnología que atañe a la movilidad militar de otros países europeos como los bálticos. Asimismo, el Gobierno dudaba de si las fábricas de Magyar Vagon en Hungría tenían la capacidad suficiente para resolver todos los problemas de producción que tiene Talgo.
Posibles Pleitos Judiciales y Defensa de la Atracción de Inversión Extranjera
En el comunicado oficial, el Gobierno defiende que este veto se produce «en aplicación de la normativa española vigente en materia de control de inversiones exteriores y con pleno respeto al Derecho comunitario y las competencias de la Unión Europea sobre inversiones extranjeras directas, protección del mercado interior y la libre circulación de capitales». Sin embargo, al estar la información clasificada, el Gobierno no entra al detalle de las razones para vetar la operación.
El Ejecutivo insiste en esta legitimidad, toda vez que ya se han anunciado varios pleitos judiciales contra el Estado por parte de varios de los agentes involucrados en el proceso, como la asociación de accionistas minoritarios Aemec y la propia Magyar Vagon, que ya ha apuntado que recurriría incluso a instancias europeas para defender su operación.
Por último, el Gobierno también aprovecha para defender sus actuaciones respecto a la atracción de inversión extranjera, señalando que España ha sido el cuarto destino mundial de inversión por número de proyectos dirigidos a aumentar la capacidad productiva en el período 2018-2023, y es el décimo país desarrollado con menos restricciones regulatorias a la inversión extranjera, por delante de países como Alemania, Francia o Reino Unido.