El dormitorio es una de las habitaciones principales de nuestro hogar. Precisamente por tratarse del lugar en el que vamos a obtener el descanso necesario, reponiendo la energía que nos impulsa en el día a día, ha de ser un lugar confortable en el que encontremos, más allá de una determinada decoración, los elementos necesarios para asegurarnos esa comodidad perfecta.
Los cambios de estaciones, con sus variaciones térmicas, hacen que los dormitorios se tengan que ir adecuando según las temperaturas. Los colchones y almohadas adecuadas y la ropa de cama, en especial, se convierten en las claves principales para disfrutar de un placentero descanso.
Ahora que ya se va acercando la época invernal, te vamos a ofrecer algunas ideas que te serán muy útiles para conseguir mantener tu dormitorio en perfectas condiciones. El primer paso puede ser consultar el catálogo completo de nórdicos que, seguro, serán los que te ofrezcan la calidez tan necesaria en los días de más frío.
5 ideas infalibles para mantener tu dormitorio preparado para el invierno
Independientemente de si tu dormitorio cuenta con algún sistema de calefacción, es importante conseguir convertirlo en una zona agradable y cálida por sí misma. Mucho más si tenemos en cuenta la factura de la luz y el enorme gasto que puede suponer mantener un equipo de calefacción enchufado toda la noche. Para lograrlo, a continuación te ofrecemos unos pequeños consejos que te ayudarán a no pasar frío en las largas noches invernales.
1. La ropa de cama adecuada
Además de contar con un buen colchón y almohada, fabricada con los tejidos y las técnicas adecuadas, también es fundamental vestir la cama con las prendas apropiadas para el invierno. Lo mejor es usar sábanas de franela o pirineo. Dependiendo de la temperatura, también puedes añadir alguna manta o edredón, sin olvidar las útiles y cálidas fundas nórdicas.
2. Moqueta o alfombra para el suelo
Los suelos de mármol o gres suelen ser mucho más fríos que otros como la madera o la moqueta. Puedes cubrir el suelo de la habitación con moqueta para otorgarle una calidez extra. También, si solo quieres que sea durante el invierno, puedes emplear una alfombra grande.
3. Ventila la habitación con moderación
Incluso aunque en el exterior estemos bajo cero, es necesario que ventilemos el dormitorio una vez nos hemos levantado, pero con moderación. Con unos minutos será suficiente, en caso contrario haremos que el frío se filtre por cada rincón del cuarto, convirtiéndolo en una insufrible nevera.
4. Cubre las rendijas de ventanas y puertas
Puede ocurrir que las ventanas no cierren del todo bien. Asegúrate que están bien encajadas y si no, siempre puedes cubrir las rendijas con esas tiras especiales de esponja o látex que podrás encontrar en cualquier ferretería. También los bajos de las puertas pueden ser conductores de aire.
5. Coloca una cortina gruesa en la ventana
Los cristales de las ventanas no son buenos aislantes, así que lo mejor es cubrir la ventana con una cortina. Cuanto más gruesa sea, mayor será el aislamiento de la temperatura exterior. Mucho mejor, si la cortina cubre desde el techo al suelo, así se creará una cámara aislante entre el cristal de la ventana y el dormitorio.
Con estos sencillos trucos ya tienes un dormitorio perfecto para disfrutar del mejor sueño, incluso aunque en el exterior las bajas temperaturas hayan invadido el paisaje. Y no olvides que elegir la ropa adecuada para la cama es la clave primordial para el descanso perfecto.
