En España, plegar los retrovisores laterales de los coches al estacionar es una práctica habitual, especialmente en zonas urbanas donde las calles estrechas son moneda corriente. Los conductores, por miedo a posibles golpes o rayones, suelen recurrir a esta medida para proteger sus vehículos; sin embargo, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha lanzado una advertencia que ha sorprendido a muchos: plegar los retrovisores podría no ser tan recomendable como se pensaba. A continuación, exploramos en detalle las razones detrás de esta advertencia y te contaremos que consejos brinda la DGT para prevenir incidentes relacionados a esta acción.
1DGT: ¿Por qué plegar los retrovisores puede ser perjudicial?
Plegar los retrovisores puede parecer una medida prudente para evitar daños en el vehículo cuando se está estacionando, pero la DGT ha señalado que esta acción puede ser contraproducente. Cuando estos están desplegados, ocupan más espacio en el ancho del vehículo, lo que obliga a otros conductores a ser más cuidadosos al pasar junto a él. Este mayor cuidado puede reducir significativamente el riesgo de golpes y rayones. Sin embargo, al plegar los retrovisores, se reduce la visibilidad del vehículo, lo que puede llevar a otros conductores a tomar menos precauciones, aumentando así el riesgo de daños.
Además, en vehículos que no cuentan con un sistema automático de plegado de retrovisores, existe la posibilidad de que el conductor olvide desplegarlos antes de reanudar la marcha. Esto puede crear una situación peligrosa, ya que la falta de visibilidad lateral es un factor crítico en la seguridad vial. La DGT advierte que, en estos casos, los conductores pueden verse involucrados en accidentes que podrían haberse evitado simplemente dejando los retrovisores en su posición original.
Por lo tanto, la DGT recomienda a los conductores que, en lugar de plegar los retrovisores, tomen otras medidas para proteger su vehículo, como elegir lugares de estacionamiento seguros y utilizar protectores de espejos si es necesario. De esta manera, se mantiene la visibilidad y se reduce el riesgo de accidentes, lo que contribuye a una conducción más segura y responsable.