Hace 24 años, el 18 de agosto de 2000, María Teresa Fernández, una joven de 18 años, desapareció misteriosamente mientras se dirigía a encontrarse con un grupo de amigos en Motril, una ciudad costera del sur de España. Este trágico caso, que ha dejado a su familia devastada durante más de dos décadas, sigue sin resolverse y ahora, en el aniversario de su desaparición, la familia clama por más medios y colaboración para continuar la búsqueda.
Antonio Fernández, el padre de María Teresa, ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que cualquier persona que tenga información sobre el caso se ponga en contacto con las autoridades. Reconoce que, si bien la investigación sobre la desaparición de Ángeles Zurera en Córdoba ha sido una «ventana» de esperanza, la prioridad es que «no desaparezca el nombre, el rastro y la investigación» de su hija. Lamentablemente, los problemas de salud y el desgaste emocional han mermado la capacidad de la familia para organizarse y mantener la presión sobre las autoridades.
UNA INVESTIGACIÓN EN CONSTANTE REVISIÓN
Desde el primer momento, los padres de María Teresa descartaron la posibilidad de que su hija se hubiera escapado de casa, ya que no encontraban razones para ello. La investigación policial se centró en reconstruir los últimos pasos de la joven, pero las pistas que surgieron inicialmente no condujeron a nada concluyente. Lo único que se sabe es que María Teresa envió un breve mensaje a su novio diciendo que podría tardar, pero que iría a encontrarse con él.
Tras 15 años sin noticias de María Teresa, sus padres solicitaron al juzgado que la declarara legalmente fallecida, no solo por cuestiones administrativas, sino también para «evitar futuros problemas con la herencia» de sus otras dos hijas. Sin embargo, la familia se niega a perder la esperanza y mantiene el contacto con la Policía Nacional, que en los últimos años no ha logrado avances significativos en el caso.
LA LUCHA POR NO OLVIDAR
Cada año, la familia de María Teresa participa en una ofrenda floral en el Parque de los Pueblos de América, un acto simbólico en recuerdo de los desaparecidos. Sin embargo, los problemas de salud y el desgaste emocional van mermando su capacidad para organizar eventos más elaborados. Aun así, la determinación de la familia por mantener viva la memoria de María Teresa y la búsqueda de respuestas no ha disminuido.
En esta ocasión, la alcaldesa de Motril, Luisa García Chamorro, se ha puesto en contacto con la madre de María Teresa, María Teresa Martín, para expresar su solidaridad y apoyo a la familia. Esta muestra de empatía y compromiso por parte de las autoridades locales es fundamental para que el caso de María Teresa no caiga en el olvido y para mantener la esperanza de que, en algún momento, puedan encontrarse pistas que permitan esclarecer lo ocurrido.
UN LLAMADO A LA ACCIÓN
La desaparición de María Teresa Fernández ha dejado a su familia en un estado de angustia y desesperación durante más de dos décadas. Ahora, en el aniversario de su desaparición, su padre, Antonio Fernández, hace un llamado urgente a la ciudadanía para que cualquier persona que pueda tener información sobre el caso se ponga en contacto con las autoridades.
La familia sabe que cada año les cuesta más mantener la lucha, pero su determinación por encontrar respuestas y justicia no ha disminuido. Necesitan el apoyo de la comunidad y de las instituciones para seguir adelante con la búsqueda de María Teresa y de otros desaparecidos en situaciones similares. Solo mediante la colaboración y la presión constante sobre las autoridades podrán tener la esperanza de alcanzar algún día la verdad y el cierre que tanto anhelan.