Un nuevo estudio publicado en la prestigiosa revista «Journal of Bone and Mineral Research» de Oxford University Press (Reino Unido) ha revelado hallazgos sorprendentes sobre las tasas de fractura ósea en mujeres mayores de diferentes razas y orígenes étnicos en Estados Unidos.
Durante mucho tiempo, los investigadores han sabido que el riesgo de fractura ósea es mayor en las mujeres blancas en comparación con otros grupos. Sin embargo, este nuevo trabajo es el primero en mostrar las tasas reales de fractura entre mujeres asiáticas e hispanas, grupos que hasta ahora habían sido poco estudiados.
LAS DIFERENCIAS ENTRE LAS MUJERES HISPANAS
Los hallazgos del estudio revelan que las mujeres hispanas tienen un 10% menos de riesgo de sufrir una fractura ósea en comparación con las mujeres no hispanas. Dentro del grupo de mujeres hispanas, las de origen cubanoamericano presentaron el mayor riesgo de fractura, mientras que las de origen hispano no especificado tuvieron el menor riesgo.
Estos resultados subrayan la importancia de comprender los factores subyacentes a estas diferencias entre los distintos grupos hispanos. Como señala la autora principal, Jane Cauley, profesora de epidemiología de la Universidad de Pittsburgh, «este estudio aporta datos novedosos sobre la incidencia de fracturas en muchos grupos raciales, étnicos y de origen que han sido poco estudiados en Estados Unidos».
Cauley también destaca la complejidad de aplicar un único ajuste por raza/etnia a las calculadoras de riesgo de fractura, dado que existen diferencias significativas incluso entre las distintas comunidades asiáticas e hispanas.
LAS TASAS DE FRACTURA EN MUJERES ASIÁTICAS
El estudio también reveló hallazgos interesantes sobre las tasas de fractura ósea en mujeres de origen asiático. Los investigadores observaron que, en comparación con el riesgo de las mujeres blancas, solo las mujeres de origen chino, filipino, japonés y asiático no especificado presentaban un riesgo considerablemente menor de fractura.
Por otro lado, las mujeres de origen indio mostraron el mayor riesgo de fracturas clínicas entre las asiático-americanas, mientras que las filipinas presentaron la tasa más baja de fracturas.
Estos datos subrayan la heterogeneidad existente dentro de la población asiático-americana y la necesidad de analizar a estos grupos de manera más detallada, en lugar de considerarlos como una sola entidad homogénea.
UN ESTUDIO ÚNICO EN SU CLASE
El estudio realizado por el equipo de investigadores utilizó datos de la Iniciativa para la Salud de la Mujer, un proyecto de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos que comenzó en 1991. Esta base de datos proporciona la mayor cohorte racial y étnicamente diversa que ha evaluado las fracturas en mujeres posmenopáusicas.
A lo largo de dos décadas, esta investigación muestra que 71.124 mujeres, el 44,2% de las observadas en el estudio, experimentaron una fractura ósea. El riesgo de cualquier fractura fue mayor en las mujeres blancas, seguidas de las indias americanas/nativas de Alaska, multirraciales, asiáticas y, a continuación, de las isleñas del Pacífico. Las mujeres negras presentaron la tasa más baja de fracturas óseas.
Este estudio destaca la importancia de comprender las diferencias en el riesgo de fractura entre los diversos grupos raciales y étnicos, con el objetivo de mejorar los algoritmos de predicción de fracturas y optimizar el tratamiento de la osteoporosis y sus consecuencias.