Y es que los coches se deben cuidar todos los días, pero en verano mucho más. El verano trae consigo días soleados y altas temperaturas que no solo afectan a las personas, sino también a nuestros vehículos. Las elevadas temperaturas y la fuerte radiación solar pueden causar estragos en la pintura, los neumáticos y el interior de tu coche. Para mantener tu vehículo en óptimas condiciones durante los meses más calurosos, es fundamental tomar ciertas precauciones. A continuación, te ofrecemos algunos consejos clave para proteger tu coche del calor extremo este verano y asegurar un viaje sin contratiempos.
2Revisa los neumáticos y ajusta la presión
Los neumáticos son especialmente vulnerables en condiciones de calor extremo. Las altas temperaturas pueden afectar la presión del aire y el rendimiento de las ruedas. Revisa la presión de los neumáticos al menos una vez al mes y siempre antes de emprender un viaje largo. Ajusta la presión según las recomendaciones del fabricante, que suelen estar indicadas en el manual del usuario o en una pegatina en el marco de la puerta del conductor. Mantener los neumáticos correctamente inflados no solo te ayudará a evitar problemas en la carretera, sino que también mejorará el rendimiento del combustible.
Además, inspecciona tus neumáticos en busca de signos de desgaste, como grietas o deformaciones. Si notas algún daño, acude a un taller especializado para un reemplazo inmediato.