La industria de los videojuegos ha experimentado una transformación significativa en los últimos años, con el auge del formato digital como una de las tendencias más destacadas. Mientras que los formatos físicos han dominado el mercado durante décadas, los datos revelan que el futuro parece inclinarse cada vez más hacia las opciones digitales.
La Transición hacia los Videojuegos Digitales
Según un informe de la plataforma Newzoo, el formato físico apenas representó el 5% de los beneficios generados por las ventas de videojuegos en 2023. Por el contrario, el 95% restante de los ingresos corresponde a las compras digitales, superando incluso las cifras del año anterior, cuando las ventas en línea ya representaban el 94,2% del total.
En el caso de España, la Asociación Española de Videojuegos (AEVI) reveló en su ‘Anuario de la Industria del Videojuego en España en 2023’ que las ventas de títulos en formato físico alcanzaron los 1.038 millones de euros, mientras que las de juegos en formato ‘online’ superaron los 1.301 millones de euros.
Estos datos apuntan a una clara tendencia hacia la adopción de los formatos digitales, lo que ha llevado a los jugadores a cuestionarse si el formato físico tiene un futuro viable en la industria.
Ventajas y Desventajas de los Formatos Físicos y Digitales
Ambos formatos, físico y digital, presentan ventajas y desventajas a la hora de disfrutar de los videojuegos. Una de las principales diferencias radica en dónde se ejecuta el juego. En el caso del formato digital, el ‘cloud gaming’ o juego en la nube ofrece la posibilidad de jugar a través de hardware remoto, correspondiente a servidores de una compañía, evitando la necesidad de utilizar un disco físico e instalar el juego en el dispositivo.
Una de las principales ventajas de los videojuegos digitales y el ‘cloud gaming’ es su comodidad de adquisición, ya que los usuarios pueden acceder a la plataforma correspondiente y comprar el título de forma rápida y sencilla, sin tener que desplazarse físicamente a una tienda. Sin embargo, esto conlleva la dependencia de una conexión a internet en la mayoría de los casos, lo que puede suponer un inconveniente si hay problemas de conectividad.
Por su parte, el videojuego en formato físico ofrece mayor control y flexibilidad para los usuarios, ya que son propietarios del título y pueden jugarlo cuantas veces deseen, prestarlo, revenderlo o incluso heredarlo. No obstante, la adquisición de estos juegos físicos requiere desplazarse a un establecimiento y depender de su disponibilidad en stock.
¿Desaparecerá el Formato Físico?
Dadas las cifras que respaldan la predominancia del formato digital, el futuro del videojuego en formato físico parece estar cada vez más en entredicho. Algunas empresas, como Ubisoft, consideran que el paso del uso de videojuegos en formato físico al juego en la nube es un cambio en el consumidor que debe ocurrir, y que el modelo de suscripción es una «tremenda oportunidad de crecimiento».
Sin embargo, otras importantes plataformas, como Xbox y Capcom, continúan vislumbrando un espacio para el juego físico en la industria. El CEO de Microsoft Gaming, Phil Spencer, aseguró que Xbox no tiene planes de abandonar el lanzamiento de sus videojuegos en formato físico. Del mismo modo, Capcom ha detallado que, dada la significativa demanda de usuarios por los juegos físicos, actualmente no esperan eliminar los productos físicos de su catálogo.
En conclusión, si bien el formato digital parece dominar el mercado, el formato físico aún mantiene un nicho importante entre los jugadores. La supervivencia y el equilibrio entre ambos modelos dependerá de la capacidad de las empresas para adaptarse a las preferencias y necesidades cambiantes de los consumidores.
