Marc Márquez ha lanzado una clara declaración sobre la creciente presión que siente por parte de Ducati, desafiando las expectativas de su equipo y admitiendo que no está en condiciones de luchar por el título de MotoGP esta temporada. En un comentario sincero, Márquez mostró su frustración con la constante presión y subrayó que, a pesar de las expectativas, “no estamos en la pelea por el Mundial de MotoGP”.
Conocido por su honestidad y determinación, el piloto catalán ha adoptado una postura más realista, reconociendo que, en las circunstancias actuales, el campeonato está fuera de su alcance. Esta actitud no solo refleja su visión de la situación competitiva, sino que también hace un llamado a la humildad y a una evaluación sincera del estado del equipo y sus posibilidades en la competición.
6Realismo y autoevaluación
Marc Márquez también busca ser realista y transmitir esa perspectiva a sus seguidores.
“Me gustaría decir que hay opciones, claro, pero no las hay. No estamos listos para luchar por el Mundial cuando en las últimas cuatro carreras nos sacan una media de cinco o seis segundos”, aclara.
Esta postura refleja una aceptación de la realidad actual y un llamado a enfrentar las próximas competencias sin la presión de expectativas desmedidas.