Es alarmante constatar que el salario de los jóvenes no llega a representar ni tres cuartas partes del salario medio de la población en su conjunto. Según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del 2022, el salario bruto medio de los jóvenes es de 18.699,3 euros, lo que supone «un fuerte impedimento para su emancipación. La Unión General de Trabajadores (UGT) advierte que, a pesar de las mejoras en el empleo tras la reforma laboral, el nivel de ingresos de los jóvenes sigue sin ser suficiente para acceder a una vivienda.
Además, la precariedad laboral que sufren los jóvenes, con altos niveles de desempleo, temporalidad y parcialidad, se traduce en que casi 8 de cada 10 menores de 26 años no declaren ingresos superiores al Salario Mínimo Interprofesional (SMI) anual equivalente a tiempo completo. De hecho, hasta un 55% se sitúa entre 0 y 0,5 SMI. Estas cifras son alarmantes y ponen de manifiesto la dificultad que enfrentan los jóvenes para lograr una emancipación temprana.
La Tardía Emancipación, un Problema Acuciante
La tardía emancipación de la población joven en España es uno de los principales problemas a los que se enfrentan. Según datos de Eurostat, la edad media de emancipación en nuestro país se situó en 2023 en 30,4 años, frente al promedio de 26,3 años de los países de la Unión Europea (UE). Esta brecha revela lo complicado que resulta para los jóvenes españoles establecerse de manera independiente.
Incluso el nivel de estudios no garantiza una emancipación más temprana, ya que solo 3 de cada 10 jóvenes con estudios superiores lograron vivir emancipados durante la segunda mitad de 2023. Esta realidad contrasta con la idea de que la formación académica facilitaría el acceso a la vivienda.
Ante esta situación, el 56,6% de las personas jóvenes se ve obligado a vivir de alquiler, 8,1 puntos más que hace una década, según datos de la Encuesta de Condiciones de Vida (ECV). Además, hasta un 27,9% de los jóvenes que viven en alquiler se ven abocados a compartir piso con personas ajenas a su núcleo familiar, según el Consejo de Juventud de España (CJE).
Políticas Urgentes para Mejorar el Acceso a la Vivienda
Frente a este panorama, la Unión General de Trabajadores (UGT) considera que regular los precios máximos en zonas tensionadas y trazar un «ambicioso» plan de ampliación del parque público de viviendas «siguen siendo las políticas más eficaces y garantistas» para mejorar el acceso a la vivienda.
Asimismo, el sindicato pide seguir mejorando la regulación del mercado inmobiliario y reforzar el esfuerzo presupuestario y la cobertura de ayudas como el bono joven de alquiler. Estas medidas buscan proporcionar a los jóvenes alternativas viables y asequibles para lograr su anhelada emancipación.
En conclusión, los datos expuestos en este artículo revelan una realidad preocupante para los jóvenes españoles en su acceso a la vivienda. La precariedad laboral, los bajos salarios y la falta de viviendas asequibles son obstáculos que deben ser abordados con políticas decididas y efectivas. Solo así podremos garantizar que los jóvenes de nuestro país puedan alcanzar una emancipación temprana y mejorar sus condiciones de vida.