En los últimos meses, Europa ha sido testigo de un preocupante aumento en el número de casos del Virus del Nilo Occidental (VNO), una enfermedad transmitida por mosquitos que puede tener graves consecuencias para la salud pública. Según informes del Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades (ECDC), países como España y Grecia han registrado un mayor número de casos de esta infección en comparación con temporadas anteriores.
UNA SITUACIÓN ALARMANTE EN ESPAÑA Y GRECIA
A finales de julio, el ECDC reportó un total de 69 casos humanos de infección por VNO adquirida a nivel local en ocho países europeos. Grecia encabezó la lista con 31 casos, seguida de Italia con 25 y España con 5 casos. Lamentablemente, Grecia, Italia y España también informaron de 8 fallecimientos relacionados con esta enfermedad.
Aunque a nivel europeo el número total de casos notificados hasta el momento se encuentra dentro de lo esperado, la situación en Grecia y España es particularmente preocupante, ya que el número de casos en estos países supera al de años anteriores. Además, los indicadores clínicos y de gravedad de los casos reportados son similares a los observados en temporadas previas.
LAS CONDICIONES CLIMÁTICAS FAVORABLES AUMENTAN EL RIESGO
Según los expertos, las condiciones meteorológicas actuales en Europa son particularmente favorables para la transmisión del VNO. Este virus se propaga a través de la picadura de mosquitos, siendo el mosquito ‘Culex pipiens’ el principal vector responsable de su circulación en el continente. La presencia abundante de este tipo de mosquito, originario de Europa y distribuido por todo el continente, sumado a las condiciones climáticas propicias, hacen que se espere un aumento en el número de casos humanos de infección por VNO en las próximas semanas y meses.
MEDIDAS DE PREVENCIÓN PARA PROTEGER A LA POBLACIÓN
Ante esta situación, es fundamental que la población adopte medidas de protección personal para prevenir la infección por el VNO. Algunas de las recomendaciones clave incluyen el uso de repelente de mosquitos, llevar ropa que cubra la mayor parte del cuerpo y dormir en habitaciones con mosquitera o aire acondicionado.
Además, las autoridades sanitarias deben reforzar los programas de vigilancia y control de mosquitos, así como intensificar las campañas de educación y sensibilización dirigidas a la población sobre los riesgos y medidas de prevención asociadas a esta enfermedad. Es fundamental que tanto los gobiernos como la población tomen acciones coordinadas para hacer frente a esta situación y evitar que el brote de VNO se extienda aún más por Europa. Solo a través de una respuesta integral y oportuna se podrá mitigar los efectos de esta preocupante tendencia en la salud pública.