El Govern balear ha anunciado una iniciativa crucial para abordar los desafíos que enfrentan los Consells Insulars de Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera en la acogida y tutela de niños y adolescentes extranjeros no acompañados. Ante la creciente demanda de servicios para esta población vulnerable, el Govern ha establecido una línea de subvenciones extraordinarias para apoyar a las instituciones insulares y garantizar una respuesta efectiva y sostenible.
La consellera de Familias y Asuntos Sociales, Catalina Cirer, ha sido enfática en su compromiso de movilizar los recursos necesarios para «paliar» los sobrecostes que han recaído sobre los Consells Insulars. Reconociendo que la Conselleria no tiene la capacidad económica para cubrir el 100% de estos gastos, estimados en unos 40 millones de euros, Cirer ha asegurado que se buscarán «las partidas económicas» para brindar la ayuda requerida.
UN LLAMADO A LA ACCIÓN COORDINADA
Los representantes de los Consells Insulars han expresado su agradecimiento por el apoyo ofrecido por el Govern, destacando la importancia de la reunión de coordinación celebrada. El conseller de Bienestar Social y presidente del Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS), Guillermo Sánchez, ha resaltado la necesidad urgente de contar con más recursos para atender adecuadamente a los niños y adolescentes migrantes no acompañados que llegan a la isla.
Según Sánchez, el sistema de protección de la infancia y la adolescencia del IMAS ha alcanzado su límite, requiriendo una mayor dotación económica, así como más recursos humanos y espacios de acogida. Actualmente, el IMAS atiende a 603 menores en situación de acogimiento residencial, de los cuales 303 son migrantes no acompañados. Sánchez advierte que la llegada de 164 adolescentes este año, sin un adulto de referencia, hace prever que en 2024 se doblará la cifra de 180 menores llegados durante 2023.
EL RETO DE LAS ISLAS MENORES
Por su parte, el presidente del Consell de Formentera, Llorenç Córdoba, ha expresado que la previsión del Consell en esta materia se ha «desmontado» debido a la llegada exponencial de menores. Córdoba ha señalado que la situación es «suficientemente grave» y que Formentera no tiene la capacidad necesaria para acoger a todos los menores no acompañados que llegan a la isla.
Desde Ibiza, la consellera insular de Bienestar Social, Familia e Igualdad, Carolina Escandell, ha lamentado la crisis habitacional y la «falta importantísima» de profesionales asistenciales, factores que «dificultan enormemente» la posibilidad de brindar la atención adecuada a los menores migrantes no acompañados.
Finalmente, la consellera de Bienestar Social del Consell de Menorca, Carme Reynés, ha destacado la «importancia» de los espacios de coordinación entre las diferentes instituciones para trabajar de manera conjunta y efectiva en esta problemática.
UN COMPROMISO FIRME DEL GOVERN
El Govern balear ha demostrado su compromiso de hacer «lo posible» para apoyar a los Consells Insulars en esta situación apremiante. Catalina Cirer ha sido clara al afirmar que «desde el Govern no podemos dar la espalda a los Consells», y ha reiterado la petición de convocar una Conferencia de Presidentes para abordar la problemática migratoria de manera integral.
Esta iniciativa del Govern balear representa un paso crucial en la búsqueda de una solución sostenible y colaborativa para atender las necesidades de los menores migrantes no acompañados en las Islas Baleares. Al movilizar recursos financieros y fomentar la coordinación entre las instituciones insulares, el Govern demuestra su compromiso de garantizar el bienestar y la protección de esta población vulnerable, que enfrenta desafíos únicos en cada una de las islas.
