El verano trae consigo el calor, las ventanas abiertas y, con ello, un aumento en el polvo y la humedad en nuestros hogares. Combatir estos problemas puede parecer una tarea ardua, pero con algunos trucos caseros, puedes mantener tu casa limpia y confortable. Aquí te dejamos algunos consejos esenciales para reducir el polvo y la humedad durante los meses más cálidos.
1Mantén el polvo a raya con una limpieza estratégica
Para mantener tu hogar libre de polvo, es crucial seguir una rutina de limpieza eficaz. Limpia de arriba abajo: comienza con las superficies más altas, como estantes y lámparas, y luego avanza hacia las más bajas. Esto evitará que el polvo caiga sobre áreas ya limpias. Utiliza trapos de microfibra en lugar de plumero para atrapar el polvo en lugar de moverlo de un lugar a otro. No olvides aspirar al menos una vez a la semana para eliminar el polvo acumulado en alfombras y tapetes, asegurando una limpieza profunda.