Mark Zuckerberg, director ejecutivo de Facebook, lo tiene muy claro. En una conversación con Jensen Huang, CEO de Nvidia, describió un futuro donde las gafas inteligentes serán predominantes. Estos dispositivos, según Zuckerberg, integrarán la inteligencia artificial en la vida diaria de tal manera que nadie notará su presencia.
1El creador de Facebook, Mark Zuckerberg, tiene claro el dispositivo con IA
Todo esto, como era de esperar, surge con la intención de «promocionar» las Ray-Ban Meta, aunque Zuckerberg ya ha insinuado una evolución en estos dispositivos. La próxima generación de gafas inteligentes, según explica, buscará un equilibrio perfecto entre estética y funcionalidad.
Por supuesto, la inteligencia artificial será el núcleo de estas gafas. Al igual que un asistente personal siempre disponible, la IA estará presente para casi todo lo que necesites, desde responder preguntas y traducir idiomas en tiempo real hasta ofrecerte indicaciones y recomendaciones personalizadas. Además, la IA se adaptará a tus preferencias y hábitos para convertirse en tu compañero fiel de vida. Esta predicción, aunque arriesgada, no parece descabellada dado el panorama actual. Grandes empresas como Snap y Google también están invirtiendo fuertemente en esta tecnología, lo que indica un futuro prometedor en este ámbito.
Sin embargo, no será un camino sencillo. El hecho de que estas gafas, que algunas personas ya usan como accesorio, se conviertan en una moda generalizada, no será tarea fácil. Uno de los grandes desafíos, ya mencionado desde hace tiempo, es la privacidad.
Al incorporar cámaras y micrófonos, estas gafas recopilarán una gran cantidad de datos personales, desde tus conversaciones hasta tus movimientos. ¿Quién tendrá acceso a esta información? ¿Cómo se garantizará que no se utilice de manera indebida?
Además, si estas gafas están conectadas a internet, serán vulnerables a ciberataques como cualquier otro dispositivo. Imagina las consecuencias si alguien hackea tus gafas y puede controlarlas a distancia o acceder a tu información personal.
En definitiva, cualquier innovación conlleva potenciales problemas, por lo que será necesario resolver estas inquietudes y garantizar la máxima seguridad y privacidad antes de que estas gafas realmente se popularicen entre la población general.
