La licitación de obra pública en España ha experimentado un crecimiento moderado durante el primer semestre de 2024, según los datos publicados por la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras (Seopan). Esta información revela un panorama mixto, con algunas administraciones públicas impulsando fuertemente sus inversiones, mientras que otras han reducido significativamente su actividad licitadora.
Descenso en la Actividad de la Administración General del Estado
La Administración General del Estado ha sido la principal responsable de la desaceleración en la licitación de obra pública, al reducir sus inversiones en un 16,2%, alcanzando solo 4.000 millones de euros. Este retroceso contrasta con el aumento del 18% en los ayuntamientos (5.425 millones) y del 3,2% en las comunidades autónomas (4.218 millones).
Dentro del Gobierno, el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, principal inversor de obra pública, ha licitado 2.842 millones de euros, lo que representa un 20,5% menos. Esta caída se debe principalmente a la reducción del 25% en Adif (1.707 millones), del 40% en las carreteras (385 millones) y del 70% en Seitt (autopistas, con 29 millones de euros).
Por otro lado, el Departamento que dirige Óscar Puente aumentó en un 5,6% las licitaciones en los puertos (277 millones), mientras que Aena registró un ligero incremento del 0,6% (237 millones de euros). El Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico también licitó un 28% menos, con solo 167 millones de euros.
Disparidad en la Actividad Licitadora de las Comunidades Autónomas
La evolución de la licitación de obra pública a nivel autonómico también ha sido dispar. Madrid ha sido la comunidad que más ha impulsado sus inversiones, disparando las licitaciones un 300%, hasta los 1.040 millones de euros. Asturias también ha registrado un notable aumento del 115%, hasta los 125 millones, y La Rioja ha crecido un 75%, hasta 30 millones.
Otras comunidades como Murcia han impulsado un 56% sus licitaciones (60 millones), País Vasco un 45% (515 millones), Cataluña un 29% (691 millones) y Baleares un 0,2% (80 millones). Sin embargo, no todas las regiones han seguido esta tendencia de crecimiento, y algunas como la Comunidad Valenciana, Canarias y Castilla-La Mancha han experimentado importantes retrocesos en su actividad licitadora, del 70%, 62% y 61%, respectivamente.
Perspectivas de Futuro para el Sector de la Construcción
Estos datos muestran un panorama heterogéneo en la licitación de obra pública en España, con administraciones que han priorizado la inversión en infraestructuras y otras que han reducido significativamente sus compromisos. Esta disparidad en la actividad licitadora plantea retos y oportunidades para el sector de la construcción, que deberá adaptarse a las diferentes dinámicas regionales y sectoriales para aprovechar al máximo las oportunidades que surjan en los próximos meses.