Alerta de la Reserva Federal: la inflación en España pierde fuerza en el mes de junio

En un escenario económico marcado por la preocupación por la inflación, la más reciente publicación de los datos del Índice de Precios de Gasto de Consumo Personal (PCE) de Estados Unidos ha generado interés entre analistas y observadores del panorama económico.

Este indicador, considerado como la principal estadística utilizada por la Reserva Federal (Fed) para monitorizar la inflación, ha mostrado señales de moderación en el mes de junio, abriendo expectativas sobre la evolución futura de los precios.

Según la información proporcionada por la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio, el índice general del PCE se situó en el 2,5% a nivel interanual en junio, lo que representa una disminución de una décima con respecto al mes anterior. Este dato sugiere que la inflación en Estados Unidos estaría dando muestras de estabilización, aunque aún se mantiene por encima del objetivo del 2% establecido por la Fed.

El Comportamiento del Índice Subyacente y los Componentes Clave

Al analizar los componentes del PCE, se observa que el índice subyacente, que excluye los precios de los alimentos y la energía debido a su mayor volatilidad, cerró el mes de junio con un incremento del 2,6%, sin cambios significativos con respecto al mes previo. Por su parte, los precios de los alimentos registraron un aumento del 1,4%, mientras que la factura energética se encareció un 2%.

En términos mensuales, el índice general del PCE mostró una lectura del 0,1%, lo que representa un leve repunte con respecto al estancamiento observado en mayo. De manera similar, el índice subyacente también registró un incremento de una décima, alcanzando el 0,2%.

Las Acciones de la Reserva Federal y el Escenario Actual

Para hacer frente a la presión inflacionaria, la Reserva Federal ha implementado un conjunto de medidas, entre las que destaca el aumento consecutivo de los tipos de interés a partir de marzo de 2022. Este ciclo de subidas de tipos se detuvo en julio de 2023, situando el rango objetivo actual entre el 5,25% y el 5,5%, un nivel no visto desde enero de 2001.

En su última reunión celebrada el 12 de junio, la Fed optó por mantener los tipos de interés sin cambios e indicó que no esperaba que fuese «apropiado» reducirlos hasta que adquiriese una mayor seguridad de que la inflación estaba volviendo de forma sostenida hacia el 2%, su objetivo de política monetaria.