El pasado mes de mayo, un ciudadano gallego se convirtió en el centro de atención al ser procesado por alertar a más de 15,000 conductores sobre la presencia de radares y controles policiales a través de WhatsApp. Este acto, conocido ahora como el «Método Gallego«, ha puesto en aprietos a la Dirección General de Tráfico (DGT) y a las fuerzas de seguridad, que ven cómo esta práctica se extiende y complica sus esfuerzos para mantener la seguridad vial en las carreteras españolas. En este artículo te contaremos por qué la DGT considera este “método” como un problema y hablaremos de las medidas que se tomarán para eliminarlo. ¡No te lo pierdas!
3La DGT está preocupada por el impacto en la seguridad vial
La DGT y las fuerzas de seguridad han subrayado los peligros asociados al «Método Gallego». No se trata solo de evitar multas por exceso de velocidad; estas alertas también ponen en riesgo operaciones críticas como controles de alcohol y drogas, así como la búsqueda de sospechosos. Según Pere Navarro, director de la DGT, estas acciones representan «un acto insolidario que va contra la línea de flotación de la seguridad vial».
La capacidad de alertar a miles de conductores al instante puede socavar gravemente los esfuerzos de las autoridades para mantener la seguridad en las carreteras. Los controles de velocidad, alcohol y drogas no solo tienen como objetivo sancionar a los infractores, sino también prevenir accidentes y salvar vidas. La difusión masiva de información sobre estos controles puede reducir su eficacia y, en última instancia, aumentar el riesgo de accidentes y muertes en las carreteras.