La industria del aceite de oliva se enfrenta a un desafío constante: mantener la excelencia y la calidad de este preciado producto, mientras se adapta a las cambiantes demandas del mercado. En este contexto, el Gobierno de España, en conjunto con la Junta de Andalucía y la Organización Interprofesional del Aceite de Oliva Español, han emprendido un proyecto innovador que busca revolucionar la forma en que se clasifica este alimento fundamental de la dieta mediterránea.
Desarrollo de Nuevas Tecnologías para la Clasificación de Aceites
El actual sistema de clasificación de aceites de oliva vírgenes se basa en un análisis organoléptico realizado por paneles de cata debidamente formados y homologados. Este método, si bien efectivo, requiere de un proceso laborioso y lento, lo que ha llevado a las autoridades a buscar alternativas más eficientes.
El proyecto piloto innovador del Grupo Operativo GO Sensolive Oil, lanzado en 2013, ha involucrado a investigadores de una decena de centros en el desarrollo de tecnologías instrumentales respaldadas por algoritmos e inteligencia artificial. Estas herramientas permitirán realizar un triaje previo automatizado, agilizando significativamente los procesos de cata.
Mediante este convenio, los organismos firmantes trabajarán de manera conjunta en la revisión de resultados y la verificación del funcionamiento de los nuevos modelos desarrollados. Estos equipos operarán en el Laboratorio Arbitral Agroalimentario de Madrid, perteneciente al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y en el Laboratorio Agroalimentario de Córdoba, de la Junta de Andalucía.
Expansión de la Base de Muestras y Colaboración Internacional
Uno de los objetivos clave de este convenio es la ampliación del número de muestras de aceites procedentes de otros países, lo que permitirá reforzar la validez de uso de los modelos en un mercado global. Estas nuevas muestras se sumarán a las aportadas por el sector y a las obtenidas mediante la cooperación con otros proyectos de I+D.
Cabe destacar que tanto el Ministerio como la Junta de Andalucía seguirán aportando muestras de aceites de oliva caracterizados, con el fin de continuar optimizando los modelos estadísticos desarrollados para la clasificación. De esta manera, se buscará obtener resultados cada vez más precisos.
Hacia una Mejora Sustancial en la Calidad y Eficiencia del Sector Oleícola
La implementación de estas nuevas tecnologías de clasificación representa un hito fundamental en la evolución del sector oleícola español. Al automatizar y agilizar los procesos de análisis organoléptico, se podrá mejorar sustancialmente la calidad del producto que llega a los consumidores, además de dotar de mayor eficiencia a todo el sistema de control.
Este proyecto innovador demuestra el compromiso de las autoridades españolas y de la industria del aceite de oliva por mantener la excelencia y la calidad de este producto emblema de la dieta mediterránea, adaptándose a los desafíos del mercado y anticipándose a las necesidades futuras.