La firma de hemoderivados Grifols ha experimentado recientemente varios cambios significativos en su liderazgo y estructura de gobierno corporativo. Por un lado, Jefferies Financial Group, un importante accionista de la compañía, ha reducido su participación en la firma, pasando de un 3,355% a un 3,202% de los derechos de voto.
Este movimiento se enmarca en las negociaciones entre la familia Grifols y el fondo Brookfield para lanzar una posible Oferta Pública de Adquisición (OPA) de exclusión sobre la empresa catalana. Además, se produce justo antes de que la agencia de calificación crediticia Moody’s anunciara la retirada del ‘rating’ a Grifols. Según los precios del mercado, el paquete de acciones de Jefferies, que roza los 13,6 millones de títulos, tendría un valor de unos 124,7 millones de euros.
Reestructuración del Consejo de Administración de Grifols
Por otro lado, Grifols ha reorganizado su consejo de administración tras la renuncia de dos de sus consejeras independientes, Claire Giraut y Carina Szpilka Lázaro. La compañía ha nombrado a Montserrat Muñoz, exdirectiva de Danone y consejera independiente y presidenta de la Comisión de Auditoría y Compliance de Uriach, como nueva consejera independiente coordinadora del órgano.
Además, Anne-Catherine Berner, exdiputada del Parlamento finlandés y ministra de Transporte y Comunicaciones de 2015 a 2019, ha sido designada como nuevo miembro de la Comisión de Auditoría y como nueva presidenta de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones. Por su parte, Enriqueta Felip fue elegida miembro de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones.
Preocupaciones de los Accionistas Minoritarios
Estas salidas de consejeras independientes han generado preocupación entre los accionistas minoritarios, representados por la Asociación Española de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (Aemec). Según fuentes de esta asociación, la dimisión de las consejeras en un momento marcado por la posible OPA es «un síntoma de que algo no funciona en la gobernanza de la compañía».
No obstante, la asociación comprende que el número de consejeros independientes no alcance la mitad del consejo, tal y como establece el ‘Código de buen gobierno de las sociedades cotizadas’ de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), ya que entienden que es un periodo de interinidad.
En resumen, los recientes cambios en la participación accionarial y en la estructura de gobierno corporativo de Grifols han generado inquietud entre los inversores, quienes observan con cautela las decisiones y movimientos de la firma de hemoderivados en un momento clave de su historia.