Cuando visitas una farmacia, te encuentras con un entorno lleno de productos que van desde medicamentos recetados hasta artículos de cuidado personal. Uno de los gestos más comunes que observas es el farmacéutico recortando el código de barras de los medicamentos. Aunque parece una tarea simple, este proceso tiene un trasfondo importante y, a menudo, genera preguntas sobre su relevancia en la actualidad. Aquí te explicamos por qué este procedimiento continúa siendo necesario y cuándo podría cambiar.
2La transición hacia la digitalización
A pesar de que el recorte de códigos de barras ha sido la norma durante años, se han desarrollado alternativas más modernas. El código ‘datamatrix’, similar a un código QR, permite a los farmacéuticos escanear la información del medicamento directamente. Este sistema ofrece beneficios significativos, como la identificación del lote de fabricación, lo que facilita la gestión de retiradas de productos si la Agencia Española de Medicamentos lo requiere. Sin embargo, la implementación de este nuevo método todavía no es universal, lo que obliga a muchas farmacias a seguir con el procedimiento tradicional.